David Alejandro Chacón

@DavidChacon30

El lunes 17 de agosto, en Texas, Estados Unidos, los Padres de San Diego estaba de visita para enfrentar a los Rangers. Un juego más del calendario de 60 compromisos, en esta atípica temporada que no deja de sorprender por donde se mire. Seguimos.

En el octavo episodio, ganando los padres por siete carreras (10-3), el dominicano Fernando Tatis Jr., una de las máximas estrellas del torneo, se encontraba en cuanta de tres bolas sin strikes.

Su mánager Jayce Tingler, le mandó a esperar un pitcheo. Tatis, quien dijo “que perdió” la seña, hizo swing y el resultado fue un cuadrangular de más de 400 pies con las bases llenas que abultó el marcado 14-3.

Cuando Tatis regresó a dogout, según una nota de TMZ Sports, su mánager y compañeros no estaban contentos con el joven pelotero de apenas 21 años.

Menos alegre estaba el mánager de los Rangers, Chris Woodward, quien lucía visiblemente enojado y mandó a que al próximo bateador, Manny Machado, le pasaron una recta de humo por detrás de la espalda. Machado, según sus gestos, estaba preparando algo muy parecido.

¡Le tocó disculparse!

Después del compromiso, Tatis Jr., en rueda de prensa, dijo que la experiencia la tomará como un aprendizaje y lo tendrá presente en una próxima oportunidad.

“Es joven, un espíritu libre y concentrado y todas estas cosas, y eso es lo último que le quitaremos. Pero esa es una oportunidad de aprendizaje, eso es todo y crecerá a partir de eso”, dijo el mánager de Padres.

El tema es medio complejo en realidad. Los puristas del béisbol están alarmados porque se respetó una regla no escrita del béisbol, el otro grupo indignado por las quejas de ambos mánagers.

Desde mi punto de vista, lo único cierto aquí es que Tatis Jr., siendo o no una mala decisión de su mánager, falló al no adaptarse a la decisión que le impusieron, que era esperar un lanzamiento.

Él debió respetar la decisión de Jayce Tingler y luego, si tenía luz verde, ahora sí hacer swing. Ahora bien, no aplaudo la decisión del estratega, conservadora por demás, pero tenían que respetarlo, por algo está a cargo del equipo.

¿Y si en el futuro manda a Tatis u otro de sus jugadores a robar una base y no lo hace y luego batean para doble play? ¡Por ejemplo!

Veo las cosas así: Tingler debía dejar batear a Tatis, pero si lo mandó a esperar, Tatis, debía esperar. Después, en privado, podían arreglar las cosas.