Entre las obras constructivas que se desarrollan actualmente en el Aeropuerto Internacional de Tocumen encuentran las enormes plataformas para estacionamientos de aeronaves, cuyo propósito es atender la creciente demanda de la industria aérea en Panamá.

 

En total, las nuevas infraestructuras, suman más  de 381 mil metros cuadrados de asfalto y concreto, entre los que se destacan los proyectos Solución Cruz, prolongación de las calles de rodaje Lima, APRON y las estaciones  remotas.

 

Las características generales de estas plataformas, sobre la cual transitarán hacia finales del año 2018 gigantescas aeronaves, supone el cumplimiento de rigorosos estándares internacionales, exigidos en la industria aérea.

 

Dentro de este paquete de proyectos, actualmente se desarrolla la obra conocida como Solución Cruz, que  abarca una superficie de 54 mil metros cuadrados, que  permitirá que los aviones se desplacen entre la actual terminal y el nuevo edificio T2, además de contar con un acceso a las calles de rodaje que facilitará a las aeronaves entrar o salir de la pista de aterrizaje.

 

Por su parte, en la plataforma de aeronaves T2 (APRON), se ejecutan actualmente, los trabajos de vaciado de concreto y colocación de más de 224 mil metros cuadrados, contemplando asfalto modificado con polímero, materiales constructivos cuyas propiedades mecánicas y físicas de las capas que la conforman, garantizan la vida útil del pavimento que se utiliza en los diferentes proyectos del Terminal aéreo.

 

Las 12 estaciones remotas, (de las cuales 8 pertenecen a la nueva T2)  o posiciones no adyacentes al terminal aéreo, donde el transporte de pasajeros para el embarque y/o desembarque se realiza mediante un servicio de buses, suman 37 mil metros cuadrados de superficie.

 

En tanto, la  Prolongación de la calle de Rodaje L  extensión Lima, abarca la construcción de 66.000 m2 de superficie pavimentada, un proyecto que admitirá acceder de forma expedita y rápida a la plataforma de la T2 sin necesidad de que las aeronaves deban transitar por el actual espacio (T1), lo cual mejorará significativamente el rodaje de los aviones, sumando a su vez más capacidad operativa al campo de vuelo.

 

Para ello, en las distintas obras que se desarrollan en el Aeropuerto Internacional de Tocumen, existen 3 plantas encargadas de proveer  el material para los diferentes proyectos: Dos que procesan asfalto, entre ellas, una que produce 120 toneladas de este material por hora y otra de base granular tratada con cemento (BGTC), lo que asegura la cantidad de material necesario para la construcción de dichas plataformas.

 

Bajo estas plataformas y calles de rodaje, estará igualmente, la nueva red de distribución de combustible  que permite conducirlo desde los tanques de almacenamiento del aeropuerto hasta las nuevas  plataforma de estacionamiento, donde se abastecerá  a los aviones mediante dispensadores con capacidad de suministro de “jet fuel” de  hasta 5,000 galones por minuto.

 

“Sobre esta plataforma logística y calles de rodaje, se  atenderá y ampliará las operaciones  del Aeropuerto Internacional de Tocumen, agilizando el embarque y  desembarque de millones de viajeros en las  futuras 20 puertas de abordaje  con que contará la nueva T2”, explicó  Jairo Triana, Vicepresidente de Proyectos e Infraestructura del Aeropuerto Internacional de Tocumen.

 

Según Triana, “Una vez finalizados estos trabajos, el Aeropuerto Internacional de Tocumen pasará de 970,000 m2 a  1 millón 351 mil metros cuadrados de calles de rodajes y plataformas para aeronaves, permitiendo disminuir los tiempos de espera de los pasajeros, así como la agilización en la llegada y salida de las aeronaves”.

 

Los trabajos en la nueva T2 marchan a buen ritmo, alcanzando el 75% de avance, que una vez listo  permitirá al complejo aeroportuario de Tocumen, manejar una  capacidad de hasta 25 millones de pasajeros al año.

 

La T2, es un edificio de 116 mil metros cuadrados por 30 metros de alto, donde se distribuirá toda la operatividad del terminal, facturación, salidas y llegadas de pasajeros, al igual que su equipaje, a un costo global, que supera los $800 millones de dólares.