En las fraudulentas elecciones parlamentarias celebradas el 6 de diciembre, apenas hubo una participación del 30.50 %, más de 40 puntos porcentuales por debajo de las elecciones parlamentarias que ganó la oposición en 2015, lo que arroja una abstención del 69.50 %
Según datos del Consejo Nacional Electoral, de los 5.2 millones de votos ejercidos en esa jornada rechazada y no avalada por más de 50 países, 3.5 millones los sumó la coalición del régimen usurpador.
Parte de la mayoría opositora que controla la Asamblea Nacional, no participó en este llamado del régimen por considerarlo fraudulento.