El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de Panamá lanzó este miércoles un programa de presupuesto abierto para promover la transparencia, la participación ciudadana y la rendición de cuentas, afirmó el titular de esa cartera, Héctor Alexander.
El presupuesto abierto para los ciudadanos es una versión simplificada del Presupuesto General del Estado y su publicación «marca un hito importante en los compromisos de Gobierno abierto» adquiridos por el Ejecutivo del presidente Laurentino Cortizo en agosto de 2021, de acuerdo con la información oficial.
El ministro Alexander afirmó que con el presupuesto abierto lo que se busca es «dar mucha pedagogía» sobre cómo se elabora este instrumento, «el principal de la política pública», cuáles son las fuentes de ingresos y en qué se gastan los recursos.
También pretende que los ciudadanos se sientan «identificados», a través de la participación, «en la estructuración» del presupuesto nacional «y además y sobre todo, que se sientan bien informados sobre cómo se está ejecutando el presupuesto y la calidad de esa ejecución», dijo Alexander a los periodistas.
«El proceso presupuestario público de Panamá se elabora, en gran medida, con poca participación de la sociedad civil y no siempre es entendible para el común de los ciudadanos», admitió el ministro, y recalcó que «siempre es crucial que tengamos como meta que ese presupuesto general del Estado pueda impactar de la mejor forma posible a la población».
El MEF dijo en una declaración pública que a largo plazo el proyecto de presupuesto abierto ciudadano «plantea alcanzar mayor espacio para la participación ciudadana».
«El lanzamiento del presupuesto abierto es muy importante para nosotros, ya que con ello estamos reafirmando nuestro compromiso como país con la transparencia, la participación ciudadana y sobre todo la rendición de cuentas», agregó Alexander .
Para la elaboración de este primer presupuesto abierto ciudadano el MEF cuenta con el acompañamiento de la Fundación para el Desarrollo de la Libertad Ciudadana – Capítulo panameño de Transparencia Internacional (TI), y de la ONG estadounidense Cuerpo de Voluntarios de Servicios Financieros (FSVC, por sus siglas en inglés).
La directora ejecutiva de la TI Capítulo Panamá, Olga de Obaldía, afirmó que la iniciativa forma parte de «la visión de una gestión presupuestaria contemporánea», y se enmarca en la serie de compromisos que adquirió el MEF el año pasado y que tiene como «meta principal que Panamá llegue a formar parte» de la Alianza para el Gobierno Abierto».
Esa serie de compromisos están encaminados a permitir la veeduría de la ciudadanía y la rendición de cuentas por parte del Gobierno en cuanto a los criterios que implican las decisiones de inversión, donde se colocan los fondos y cómo se ejecutan los mismos, explicó.
«Sabemos, no podemos ser ingenuos en ese sentido, que el presupuesto nacional se concentra no solo en las necesidades del país, sino que también que hay una gran carga de manejo y negociación política», resaltó de Obaldía.
Por su parte, el coordinador regional de la Alianza para el Gobierno Abierto, José García Morales, resaltó que «la apertura fiscal, el presupuesto abierto, es la madre de la transparencia».
Se trata de una herramienta contra la corrupción, que incrementa la confianza en las compras públicas así como la vigilancia de la ejecución presupuestaria del Legislativo y del Ejecutivo, agregó.
García Morales indicó que la Alianza está integrada ahora por 77 países y 76 gobiernos locales, a los que en mayo se sumarán otras 50 administraciones locales, que han cumplido una serie de criterios sobre transparencia y rendición de cuentas.