Más de 20 manifestantes fueron detenidos este domingo, por protestar en un sector de la capital nicaraguense, exigiendo la liberación de los más de 400 presos políticos.

La marcha fue convocada por la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), conformada por 40 organizaciones que incluyen desde partidos políticos, gremios económicos, organizaciones de la sociedad civil, a movimientos estudiantiles, campesinos e indígenas.

Entre los detenidos se encuentran importantes figuras públicas de Nicaragua como Ana Margarita Vigil y Suyen Barahona, del Movimiento Renovador Sandinista (MRS) y José Dolores Blandino, padre de la Miss Nicaragua 2007, Xiomara Blandino, suegro de Juan Carlos Ortega Murillo, hijo del presidente Daniel Ortega.

El fotógrafo de la agencia Reuters, Oswaldo Rivas fue arrollado por un paramilitar y el reportero Uriel Velásquez del periódico El Nuevo Diario fue retenido momentáneamente por la Policía.

Las detenciones violentas se dieron en horas de la mañana en el sector de Camino de Oriente, lugar donde iniciaron las protestas en el país seis meses atrás.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos condenó los arrestos a través de un pronunciamiento en su cuenta de Twitter.

La Organización de las Naciones Unidas, y el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, también lamentaron el bloqueo del gobierno sandinista a las marchas en el país.

“Frente a la detención de varias personas esta mañana en Nicaragua cuando ejercían su derecho a participar en una manifestación pacífica, reitera su llamado al Gobierno a que cese de inmediato el acoso, la intimidación y la penalización de las protestas”, dijo la ONU en su cuenta de Twitter.

Los presidentes latinoamericanos también se sumaron a condenar las detenciones arbitrarias en Nicaragua y llamaron a la comunidad internacional a tomar acciones contra el gobierno de Daniel Ortega.

“Urge la pronta liberación de los detenidos y el cese a la violencia. Comunidad Internacional debe apoyar Nicaragua en un esfuerzo de salida a la crisis”,indicó Isabel de Saint Malo, vicepresidenta y Ministra de Relaciones Exteriores de Panamá.

Por su parte el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, manifestó su “profunda preocupación por las detenciones en Nicaragua”, además condenó la “represión que está sufriendo el pueblo nicaragüense”.

Gobierno ilegaliza protestas

El gobierno del presidente Daniel Ortega emitió un comunicado asegurando que no se puede realizar ninguna actividad sin la “autorización y cobertura policial al fin de no afectar la vida social, económica, financiera y religiosa del pueblo nicaragüense”.

Sin embargo los expertos han explicado que el comunicado de la institución del orden público contradice la Constitución de Nicaragua en su artículo 53 donde expresa que se reconoce la reunión pacífica sin permiso previo.

Hasta el momento más de 400 personas se encuentran detenidas de forma arbitraria en Nicaragua, según denuncian diversos organismos locales.