A primera hora del lunes, el Gobierno brasileño pidió a las autoridades españolas y deportivas que castigaran a los responsables de los «ataques racistas» contra el jugador, mientras que el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, expresó su solidaridad.

La estatua del Cristo Redentor de Brasil apagó sus luces el lunes por la noche como muestra de solidaridad con el delantero del Real Madrid Vinicius Jr, que el domingo recibió insultos racistas de aficionados del Valencia en el estadio de Mestalla.

Las luces del emblemático monumento de Río de Janeiro, el estado en el que nació Vinicius, se apagaron a las 06:00 p.m. durante una hora como colofón a una jornada en la que el Gobierno brasileño y el mundo del fútbol se unieron para condenar los actos racistas en el partido de la liga española.

«Es un símbolo de la lucha colectiva contra el racismo y en solidaridad con el jugador y con todos los que sufren prejuicios en el mundo», dijeron las entidades, según el medio brasileño Globo.

Vinicius añadió después en Twitter: «Negro e imponente. El Cristo Redentor estaba así hace un momento. Una acción de solidaridad que me emociona. Pero quiero, sobre todo, inspirar y dar más luz a nuestra lucha».

Otras figuras del deporte como Kylian Mbappé, Rio Ferdinand y el piloto de Fórmula Uno Lewis Hamilton también expresaron su apoyo al jugador de 22 años.

El máximo responsable de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, admitió que existe un verdadero problema de racismo en el fútbol de su país, donde «los comunicados de prensa ya no sirven».