Foto: Cortesía El País

Una explosión durante un concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande, dejó al menos 22 muertos, incluidos 12 menores de 16 años, y cerca de 60 heridos.

El hecho ya fue calificado como un ataque terrorista y se produjo a las 10:33 p.m. hora local del lunes, en el vestíbulo de la Manchester Arena.

El grupo terrorista ISIS se hizo responsable del ataque por medio de un comunicado que dijo que «un soldado del califato» pudo «plantar dispositivos explosivos» en el Manchester Arena.

Se desconoce los detalles y la identidad del atacante, pero la primera ministra Theresa May calificó el ataque como «uno de los peores atentados terroristas que sufrimos en Reino Unido», que se dirigió contra «jóvenes y niños».

Hasta los momentos, ya fue detenido un hombre de 23 años por tener conexiones con el incidente. La policía espera producir mas arrestos en las próximas horas.

La cantante estadounidense Ariana Grande suspendió su gira «Dangerous Woman Tour» de forma indefinida después del atentado. Para esta semana, tenía previsto otros dos conciertos en Londres.