VOA

El subsecretario Interino de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del gobierno de Estados Unidos, el embajador Michael G. Kozak, dijo este lunes que el ejecutivo norteamericano confía en que la Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) no reconozca las elecciones a la Asamblea Nacional de Venezuela convocadas para el 6 de diciembre por Nicolás Maduro.

“Estados Unidos espera que la OEA apruebe una resolución de condena (al gobierno en disputa de Nicolás Maduro) y que no reconozca sus elecciones ilegítimas para el 6 de diciembre”, señaló el alto funcionario durante una conferencia de prensa telefónica al tiempo que recalcaba que el gobierno de Donald Trump defiende “unas elecciones libres y justas que reflejen la voluntad del pueblo venezolano”.

El presidente interino Juan Guaidó, que también es el actual líder de la Asamblea Nacional, ya se había opuesto frontalmente a estas elecciones al considerar que se estaba llevando a cabo un “abuso de poder”.

Ese mismo concepto, el de “abuso de poder”, es el que ha utilizado Kozak para referirse a los comicios organizados desde el Palacio de Miraflores. En ese sentido, agregó que no pueden celebrarse unas elecciones cuando, a su parecer, “el régimen (de Nicolás Maduro) agrede sistemáticamente a los ciudadanos y a las instituciones democráticas”.

Sobre eso recordó que las Naciones Unidas publicó un informe en el que presentaban varias pruebas para señalar a Maduro y a otros altos funcionarios de su ejecutivo como “culpables de delitos de lesa humanidad”. “Estados Unidos también sabe que son culpables de narcotráfico ilícito y también algunos funcionarios han sido sancionados”, dijo.

Ante eso, confía en que “se adopten medidas para llevar ante la justicia a aquellos que lo merezcan”.

El embajador estadounidense apuntó al diálogo como punto de partida para “una negociación” entre el gobierno en disputa de Nicolás Maduro y el resto de fuerzas, en las que estaría Guaidó, con el objetivo de “lograr un gobierno de transición”. Eso sí, subrayó, siempre y cuando “se presenten cargos criminales correspondientes” que permitan el desarrollo de una democracia “libre y transparente” en el país.

“Parte de la solución de ese país pasa por que aquellos que están acusados de delitos políticos o penales, a uno u otro lado, resuelvan eso y pasen por un proceso de justicia transicional, pero no se puede llegar a ese nivel mientras Maduro esté en el poder, porque sus motivaciones son criminales en vez de políticas”, manifestó.

Con todo, celebró que la 50ª Asamblea de la OEA continúa siendo “un foro importante” y “es un ejemplo de multilateralismo que funciona” en la región.

El subsecretario norteamericano también culpó a Cuba de ser, en parte, responsable de la crisis política, humanitaria y económica de Venezuela en tanto que, a su juicio, “ha ayudado a la represión y a la inestabilidad que emana de esa nación”.

Por eso, subrayó que el encuentro de los principales países del hemisferio occidental debe abordar estas problemáticas, de manera que se pueda encontrar una vía de salida y conseguir “elecciones justas” en países como Cuba, Nicaragua o Venezuela que “no disfrutan de ese derecho”.

“En tiempos de crisis, el pueblo necesita un gobierno transparente”, dijo.