El panameño Edgar Crespo ha destacado en múltiples competencias internacionales, gracias a su preparación y entrega. Foto: Cortesía Edgar Crespo.

El tritón del Istmo ha participado en tres Juegos Olímpicos consecutivos y aspira a participar en Tokio 2020

Cuando se le pregunta al exitoso atleta panameño Edgar Crespo por qué comenzó a practicar natación, este responde sin esconder nada. “Es que era demasiado travieso de niño y le recomendaron a mi mamá que me inscribiera en un deporte para que botara energía. Me tiraron en una piscina a ver qué pasaba y me gustó”, confesó el nacido en Ciudad de Panamá hace 27 años.

Nadie de su familia está ligado al deporte, amén de su papá que solo llegó a practicar fútbol, pero no como profesional. Por eso siente que Dios le regaló un don y lo ha sabido aprovechar para dejar a su país en alto, siempre con buenas actuaciones en competencias internacionales.

Crespo es el único nadador panameño (selección masculina) con presencia en tres Juegos Olímpicos, en su caso Beijing 2008, Londres 2012 y Río 2016. “Ha sido un trabajo duro, pero lleno de muchos momentos agradables. Sin embargo, no he logrado mi meta que es darle a mi país una gran satisfacción: quiero ser el segundo panameño con una medalla de oro en Olimpiadas”, confesó.

La experiencia en tres ciclos olímpicos ha sido de gran proyección, sin embargo Crespo recordó un logro en particular cuando apenas comenzaba su carrera. Con 16 años de edad ganó la primera medalla (bronce) para Panamá en un campeonato Mundial Juvenil, en este caso en la modalidad 50 metros pecho, estilo que es su especialidad.

Gran experiencia

El curriculum de Edgar Crespo va más allá, siempre destacando con Panamá en Juegos Deportivos Centroamericanos, competencia en la que fue nombrado en 2013 “Rey de los Juegos” después de ganar seis medallas de Oro, Juegos Centroamericanos y del Caribe, Juegos Suramericanos y Juegos Panamericanos, entre otros.

“Las competencias requieren de mucho sacrificio y entrega, y como la natación me lo ha dado todo, no me ha importado el dejarle toda mi vida. Mis familiares lo han entendido y han sido de gran ayuda, en especial mi madre, Julia de Crespo, quien ha sido mi pilar fundamental”, dijo Crespo.

Consciente de que no se puede vivir del deporte por siempre, Crespo ha combinado su carrera con importantes grados académicos. Después de graduarse de bachillerato en el Colegio La Salle de Panamá, consiguió una beca universitaria para estudiar en Estados Unidos, donde logró el grado de bachelor in business (International Marketing & Entreprenurialship Management) en la Texas Christian University.  

“No fue fácil obtener la beca, pero era una de mis metas. Una vez que me retire como atleta élite voy a tener una base de estudios importantes. Esa experiencia en Estados Unidos me ayudó con el inglés y a conocer otro ambiente que me hizo crecer”, explicó.

Ahora el próximo objetivo es hacer una maestría, por eso decidió mudarse de Estados Unidos a Austria desde hace año y medio. “En principio estoy aprendiendo alemán que es el requisito básico para entrar a la universidad. Y me decidí por ese país por la presencia de un gran entrenador llamado Dirk Lange, ex campeón mundial, quien está trabajando conmigo”.

En la mira

El 2016 lo cerró con una visita a sus familiares en Panamá y para cumplir compromisos con sus patrocinantes privados. Regresa a Austria el cinco de enero  ya listo para enfocarse en el calendario deportivo 2017, que para él arranca en marzo.

“Por ahora estoy descansando y enfocado en mi familia para luego comenzar a entrenar. Voy nuevamente, Dios primero, a cumplir otro ciclo olímpico con la intención de asistir a mis cuartas Olimpiadas”. El viaje al Istmo también fue propicio para reencontrarse con su entrenador de toda la vida, Albino Díaz.

“Venir a Panamá a recargar energías, a encontrarme con los que me han apoyado siempre, además me prepara para lo que viene a futuro, que con trabajo, sé que será excelente”, cerró el “tiburón” panameño, quien aspira a seguir los pasos de Irving Saladino, único panameño con medalla de oro en Juegos Olímpicos.

En pocas palabras

Un lugar: Ciudad de Panamá
Un plato de comida: Arroz con pollo y ensalada de fiesta
Una película: Las de Shrek
Un artista: Gilberto Santa Rosa
Un personaje que admires: Roberto Durán
Una palabra: “Perseverancia”