Por: Aura y Víctor Ramos

@3punto0

Por: Aura y Víctor Ramos

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Tener el perfil completo en cada red social donde participemos: incluye una fotografía de perfil de calidad, una buena bio y un enlace (url) que lleve a nuestros seguidores a un sitio de interés (página web, planilla de contacto, entre otros).

Tener la estrategia de redes socialescreada y a la mano: esto es lo más difícil de desarrollar pues a la mayoría de las personas no les alcanza el tiempo para crear un plan estratégico de redes sociales. Quizás por ello, esta es una de las asesorías que nos piden con más frecuencia y por ello hemos desarrollado un taller estratégico que permite obtener al final de este un plan estratégico listo y personalizado.

Publicar para el público objetivo: SI tienes un plan estratégico entonces ya sabes cuál es tu público objetivo. Todo el contenido que escribas debe estar dirigido a ese público, para ello debes saber sus gustos, sus necesidades, sus deseos no alcanzados… En pocas palabras debes tener una fotografía clara de las características de quiénes te leen o de quienes quieren que te lean.

Generar el famoso engagement: Engagement es difícil de definir, pero cuando se logra en las redes sociales es que has llegado a la madurez en el mundo 2.0: Que tu comunidad comparta y comente los contenidos que publicas.

Así que en tu plan de gestión, en tu planificación, debes incluir elementos que propicien el intercambio y el diálogo; por ejemplo, preguntar la opinión de los seguidores a diferentes temas relacionados con la marca, hacer concursos y/o encuestas. Al final el engagement se mide por el número de Likes, RTs, repost, compartir y comentarios que tenga cada uno de los elementos que publicamos. Todo un reto.

Hacer el amor y no las ventas: no se nos va a olvidar la famosa frase de Gaby Castellanos, las redes sociales no se deben usar como catálogos para vender los productos. Si lo hacemos, estaremos perdiendo el potencial que ellas tienen. Debes compartir contenido de interés y motivar a tus seguidores para que lo comenten, lo compartan y hasta lo critiquen para mejorarlo.

Fijar la frecuencia de publicación: acá no hay reglas fijas. La frecuencia de publicación depende de muchas variables: tipo de red social, país, ramo, temporada. Hay que publicar lo suficiente para que te vean y lo poco para no abrumar a tus seguidores. Una frecuencia común es un post por día para Facebook e Instagram y cinco para Twitter.

Horasde publicación: al igual que la frecuencia cada red tiene horarios de mayor tráfico.

Debes tener claro cuándo se conectan tus usuarios a la red y publicar a esas horas.

Calidad y variedad del contenido: Muchas veces hemos dicho que el contenido es el Rey, pues seguimos afirmándolo. Hay que dedicarle tiempo a esta importante tarea. No solo al texto sino al multimedia que lo acompaña (imagen, gif, video, podcast).

Inbound marketing: sobre este tema también hemos escrito anteriormente y está relacionado con el punto 5.

Hay que humanizar la marca, enamorar al cliente antes de venderle, se le debe contactar de una forma no intrusiva y aportándole valor.

Reportes para evaluación y seguimiento: No importa si manejas tus propias redes o las de un cliente, debes una vez a la semana o, máximo, una vez al mes, hacer un reporte con la evaluación y el seguimiento de ellas, llevar un histórico de datos y compararte con competidores y aliados. Todo esto con el fin de encontrar puntos débiles para mejorarlos, buenas experiencias para repetirlas y buenas prácticas para asumirlas.