El “paquetazo rojo” pronto cumplirá 15 días y el salario mínimo que se fijó entonces en 30 dólares (180 millones de bolívares), se ahogó por la hiperinflación que nada la detiene.  Al día de hoy ese salario se ubica en unos 15  dólares.  En las próximas semanas se reducirá a 10, luego a 5  y llegará a 1.  ¿Qué logró este desastroso anuncio? Un efecto imaginario por poco tiempo  y el crecimiento real de la hiperinflación en un 30 % más.

 

Amigo lector, todo sube y lo regulado desaparece ¿Encuentra usted pollo y/o carne?  si lo consigue… a cuánto? Se esfumaron, desvanecieron.  El mercado tiene sus reglas.  Nadie produce a pérdida.

 

Esta nueva tragedia del “paquetazo rojo” coincide con otras circunstancias: la  condena y destitución de Maduro por parte el TSJ Legítimo refrendada por la AN; el éxodo masivo de venezolanos que afecta y desestabiliza a toda la región; la decisión de al menos cinco países de acusar a Maduro ante la Corte Penal Internacional; y, la investigación por conspiración para  esconder, disfrazar, blanquear $1.200 millones robados a PDVSA.  El banquero Matthias Krull, luego de ser apresado en el aeropuerto de Miami por este caso, accedió colaborar con la justicia norteamericana.  Ha prendido el ventilador y afinado la voz y se dice que la lista de involucrados señalados por él, es extensa.

 

Solo esta investigación que se adelanta en el estado norteamericano de  Florida por blanqueo de capitales, junto al caso Odebrecht (existen otros), son suficientes para reconfirmar la urgente necesidad de desalojar a Maduro del poder antes que continúe destruyendo nuestro país y afectando la seguridad y la defensa regional. Sobre esto  existe amplio consenso dentro y fuera de Venezuela.

 

Si Maduro no es presidente sino reo de la justicia con una sentencia de 18 años por cumplir, tal cual lo ha reconocido la AN, el siguiente paso  es  nombrar el gobierno de transición el cual será reconocido por la comunidad internacional y apoyado por los venezolanos. Con él se abrirá un canal humanitario de emergencia, en coordinación con los gobiernos democráticos del mundo,

 

El nuevo gobierno deberá impartir órdenes al sector institucional de las FAN que haga valer la destitución de Maduro y la detención de quienes impidan ejecutar la orden emanada del Tribunal legítimo

 

Quienes dudan de la capacidad de un gobierno de transición para llevar a cabo sus decisiones deben analizar la debilidad del régimen, su aislamiento, el rechazo masivo del pueblo venezolano, la disposición de la comunidad internacional de salir de Maduro y la fractura inocultable en las Fuerzas Armadas y cuerpos policiales del país.

 

Todos estos factores, unidos a la férrea voluntad política de quienes asuman la  transición, redundará en el pronto cambio que tanto añoramos los venezolanos. No se me ocurre tarea más hermosa, demandante y urgente.