De solo pensar en las imágenes que se verán en el mundo entero este domingo 16 de julio, les juro que se me eriza la piel. Nunca, desde que tengo uso de razón, los venezolanos hemos estado más unidos en un solo objetivo. Obviamente hay de todo un poco. Pero esa es la belleza de este llamado. Unos opinan distinto a los otros. Pero ¿desde cuándo hay que ser foca y aplaudir todo lo que otro diga?
Les confieso que en un principio me decía a mí misma: Mi-misma… ¿Para qué un plebiscito, si la gente ha demostrado en las calles, hasta con su vida, que no quiere más esta desgracia? Pero, después me volví a decir a mí misma: Mi-misma esto se hará internacionalmente, para demostrarle al mundo lo que queremos los venezolanos… ¡Así que hay que salir a votar!
¿Qué los engendros que están en Miraflores no le van a parar? En primer lugar, tengo que decirles que en Miraflores no hay nadie… Como decía Honorio Torrealba: No-Hay… Todos están acurrucaditos en Fuerte Tiuna porsia… Y en segundo lugar, pensemos un poco: ¿qué pasó el otro domingo? No me diga que la noticia no lo agarró cepillándose los dientes: Leopoldo en su casa. Y hay que reconocerlo: Ninguno de nosotros tenía la esperanza de verlo salir de Green Bouquet. Porque es que desde hace años los venezolanos andamos más negativos que una radiografía.
Y no me diga que no. Todos queríamos a Leopoldo libre. Salió Leopoldo. ¿Qué decía la gente? Hmmm… Gato Encerrado. Luego Lilian dio las muérganas gracias a las dos piltrafas… Ahí nos quedamos pegados. No valió los 3 años de la chama echándole un camión. Todo el mundo tirándole hasta con el tobo. Confieso que a mí se me bajaron y se me subieron, pero creo que hay que tener un poquito de compasión. Hasta eso hemos perdido.
Se acabó el interés por la salud de Leopoldo. Hay que caerle a Lilian. ¿Y los engendros que están en Miraflores (perdón, en Fuerte Tiuna)? Gozando una y parte de la otra, viendo cómo nos despedazamos los unos con los otros.
Gracias a Dios que salió La Titi. Sí… El mal llamado “humorista” con un video falso, sobre una medio coñiza que le dió un falso militar que resultó ser su papá (linda familia). Eso nos hizo dejar a Lilian tranquila, para dedicarnos a decirle desde bofe hasta chinchurria a éste hijo de su madre que hizo semejante imbecilidad, burlándose de todo un país, solo para ganar seguidores.
Pero digo que le doy las gracias a Dios por esto, porque últimamente sólo buscamos en quien descargar la ira que muy justificadamente llevamos por dentro.
Y es que no es para menos: ¿usted se acuerda cuando uno llegaba a su casa y prendía el televisor para distraerse? ¿Con Radio Rochela, por ejemplo? ¿O una película? Ahora uno llega y se encuentra con la sapo-aplastao de Tibisay (la nombro porque está hablando en este momento que escribo) dando lecciones sobre dignidad, legalidad y todas esas cosas que no tiene ni práctica; y uno va agarrando una arrechera interna que luego se transforma en insomnio. Pero eso no es todo: luego uno ve en cualquier canal (hasta en los canales en inglés) a Nicolás hablando de paz y rogándole al Espíritu Santo… Otra arrechera.
Usted me dirá: Apago la televisión. Entonces uno se mete en las redes sociales para olvidarse un poco. Se encuentra con un “escrache” que le están haciendo a Rafael Ramírez, quien está jartándose – con j- en uno de los restaurantes de carne más caros de Nueva York, y con los reales nuestros. Otra arrechera doble.
Llegó la hora de descargarla y es ahora, este domingo, este 16 de Julio es el día de sacar las garras. Con la única arma que tenemos; o mejor dicho, la única que queremos usar: El voto. Y no empecemos con la vaina: Que no va a servir… que no le van a parar, que si Maduro, que si Tibisay… El domingo 16 de julio es el día del SÍ…SÍ Y SÍ A LAS 3 PREGUNTAS. ¡SÍ! ¡SÍ! ¡Y SÍÍÍ!
Cariños y hasta la próxima….