Referencial.

El director para la región de la ONG Transparencia Internacional (TI), Alejandro Salas, aseguró que la desigualdad, el populismo y la corrupción son la trilogía que menoscaba el  progreso de América Latina.

En su informe de 2016 indican que en “América Latina la corrupción no es un problema genético. No es algo propio, la encuentras en todas partes. Que haya o no depende de la fortaleza de las instituciones democráticas”, reseñó AFP.

Señalan que de 19 países latinoamericanos, la mayoría ha perdido puntuación: 11 cayeron en su calificación, 4 se mantuvieron estables y solamente otros 4 mejoraron, subrayó el especialista.

El ránking, de 176 países, lo encabezan Nueva Zelanda y Dinamarca. El país latinoamericano mejor evaluado es Uruguay (21º).

Mientras tanto Venezuela se catalogó como el peor país latinoamericano en el puesto 166°. “El poder ejecutivo es dueño y señor del control de las instituciones, con excepción ahora del Parlamento”, argumentó Salas.

Entre los que más cayeron en su calificación en la región destacan México, que perdió 5 puntos (123º), y Chile 4 (24º).

Sobre el fenómeno Trump, populismo y valores  Salas consideró “oportuno” ejemplificar con las recientes elecciones estadounidenes.

“El discurso de (Donald) Trump retomó una inquietud social a causa de las desigualdades, atacando a las élites en el poder. Utilizó hasta el cansancio la expresión ‘devolver la voz al pueblo’”, destacó.

No obstante, Estados Unidos ocupa el puesto 18º, o sea, se encuentra en la parte “buena” de la tabla de clasificación de IT.

Señaló que  “para luchar contra la corrupción no hay fórmulas mágicas. Necesitas las instituciones, la información, una justicia independiente del poder político”.