Caracas, 5 abr (EFE).- El ministro de Defensa del régimen venezolano, Vladimir Padrino, confirmó este lunes que ocho militares han muerto -el doble de los que se conocían hasta el momento- durante los combates en una zona fronteriza con un grupo de disidentes de las FARC, del que han fallecido nueve miembros.
«Hasta el presente se han dado nueve bajas de estos grupos terroristas y, lamentablemente, hemos sufrido la pérdida de ocho compañeros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), dijo Padrino en una comparecencia sin preguntas acerca de los combates que comenzaron el pasado 21 de marzo en el estado de Apure (fronterizo con Colombia).
Las autoridades militares habían confirmado hasta este domingo cuatro bajas en sus filas y la «neutralización» de nueve «terroristas» sin aclarar, hasta hoy, si habían fallecido o sido detenidos.
La información difundida hasta el momento por fuentes castrenses u oficiales ha sido muy escasa y ni siquiera han aclarado a qué grupo armado se enfrentan, pese a que han difundido fotos de uniformes incautados con los logos y las siglas de la antigua guerrilla de las FARC.
También varias asociaciones con miembros en la zona han confirmado que se trata de disidentes de las FARC.
Padrino tampoco confirmó de qué grupo forman parte los miembros de la banda contra la que combaten y que, además de los 8 fallecidos, ha provocado heridas a 34 uniformados «que han recibido asistencia medica en la red de salud militar», de los que 21 «han salido de alta con todos sus tratamientos».
Durante el operativo, han desactivado 16 minas antipersona instaladas por el grupo armado que, reconoció, ha afectado a soldados y «medios terrestres del ejército», además de desmantelar 6 campamentos.
ACTIVAN ZONA DE DEFENSA ESPECIAL
Padrino comentó que, por orden del presidente Nicolás Maduro, se ha activado una «zona operativa de defensa integral temporal especial» en el área, que estará comandada por el general de división Alejando Javier Benitez Marcano con «un estado mayor de coordinación».
También activaron una brigada integral, denominada Negro Primero, bajo el mando del general Wilfredo Alexander Medrano, «a quien se le asignarán las unidades militares y equipos que sean necesarios».
Asimismo, el ministro de Defensa explicó que Maduro «ha ordenado medidas extraordinarias», que incluyen la conformación de «una zona de seguridad en los municipios Páez, Muñoz y Romulo Gallegos», todos ellos en Apure y en donde se han desarrollado la mayoría de los combates.
Como parte de esas mediadas, el Comando Estratégico Operacional de la FANB diseñará y ejecutará «planes especiales de seguridad pública que hagan frente a las acciones desestabilizadoras» que atenten contra la paz, la seguridad personal y «el resguardo de instalaciones y bienes públicos y privados» para «garantizar el orden interno, la paz ciudadana y los derechos humanos».
Asimismo, comentó que ese comando, a través de la zona operativa de defensa integral de Apure y conjuntamente con las autoridades civiles, regionales y municipales, «a los fines de resguardar los derechos humanos», establecerán restricciones y horarios para el tránsito.
Del mismo modo, impondrán «restricciones de horarios para funcionamiento de lugares públicos y privados», además de poner en marcha medidas de control de seguridad «para garantizar los servicios públicos y la paz ciudadana».
LOS MILITARES HARÁN INSPECCIONES
Finalmente, Padrino aclaró que los militares desplegados en la zona «podrán realizar inspección en propiedades muebles e inmuebles de conformidad a las leyes y reglamentos vigentes», así como «desalojar ocupaciones ilegales de bienes públicos que afecten a la seguridad y defensa de la nación».
También advirtió que las unidades militares «intervendrán para restablecer el libre tránsito en zonas urbanas o rurales en caso de que este sea interrumpido», además de poner en marcha «otras acciones que garanticen el libre desenvolvimiento y la paz en la región».
Según el ministro, tras tres semanas de enfrentamientos y 17 muertos, «la región está volviendo a la normalidad».