EL NACIONAL

El reconocido director de orquesta venezolano Diego Matheuz confirmó por qué es una de las figuras más sólidas de la actual escena musical mundial.

Con una temporada de 8 presentaciones, que inició el 25 de abril y culmina este sábado 25 de mayo, su debut en el Metropolitan Opera de Nueva York no pudo ser más auspicioso: los aplausos del público y la crítica coinciden en su notable sensibilidad y búsqueda del equilibrio frente a los músicos y cantantes del elenco de la novísima Carmen de Bizet.

Christopher Corwin, crítico de la revista Observer, escribió: «La obra maestra de Bizet parecía recién acuñada mientras chisporroteaba bajo la ardiente batuta de Diego Matheuz quien (…) acompañó con sensibilidad a sus cantantes e hizo memorables los irresistibles preludios». Asimismo, María Cristina Necula en la revista digital Woman Around Town, señaló: «El canto es magnífico en todos los niveles y la orquesta, dirigida con sensibilidad por Diego Matheuz, tiene muchos matices».

«Siguiendo la estela de los directores de orquesta que triunfan en Europa y entran en el radar del Met, encontramos al debutante Diego Matheuz. El venezolano ya no es una promesa, sino una batuta contrastada, por lo que no dejó entrever ninguna duda y se mostró muy cómodo en el foso. La Carmen de Matheuz nos pareció vitalista y profunda, en estilo, con el picante justo, pero siempre en estilo. El director manejó a la orquesta con gesto claro y el resultado fue muy aplaudido por el amable público metropolitano».

Diego Matheuz sigue cada vez más enfocado en el exigente arte de la ópera. En febrero debutó con gran éxito en la Ópera Estatal de Viena con el Barbero de Sevilla. Y más recientemente cumplió una labor pedagógica y artística profunda en el montaje de Cosi fan tutte, de Mozart, con la Orquesta y el Coro de la Academia de Música Seiji Ozawa, de la cual el venezolano fue nombrado por el fallecido Ozawa como director principal.

Este mes de mayo en el Met, el director volvió a desplegar su estilo armonizador y equilibrado. Así lo destaca Rick Perdiam, de New York Classical Review. «Matheuz creó un espectáculo integrador, en el que el canto y la interpretación orquestal en el foso fueron prácticamente fluidos. El equilibrio no fue una preocupación (para Matheuz) debido a las grandes voces con las que tuvo que trabajar, pero fue extremadamente sensible a la dinámica. La batuta de Matheuz, la brillante orquestación de Bizet y las elevadas melodías, se unieron para crear un arco dramático que iluminó y electrizó el drama que se desarrollaba en el escenario».

Otro comentario halagador que demuestra el acertado estreno del conductor venezolano en el Met es el que reseñó Emma Hoffman en el sitio digital Parterre Box. «El director Diego Matheuz hizo un debut prometedor en la compañía, provocando un sonido cálido y redondo de la Orquesta de la Ópera Metropolitana. Adoptó un enfoque sencillo de los numerosos ritmos de baile de la ópera y mostró un control juicioso sobre el rango dinámico del foso…».

El director barquisimetano continúa recorriendo el mundo con su batuta: el próximo verano regresará a Italia para una nueva edición del Proyecto MACH en el marco del Festival de Música sull’Acqua,que se celebra en el Lago de Como; luego asistirá al Festival Rossini en Pesaro para dirigir Il viaggio a Reims, y en octubre conducirá la ópera L’elisird’amore, de Donizetti, en el Teatro Municipal de Santiago de Chile.