Una drástica reducción del tráfico y el intenso trabajo de los quitanieves marcaban este martes en Nueva York el inicio de la peor tormenta de la temporada invernal que, sin embargo, estaba teniendo un impacto menor al esperado.
En el centro de Manhattan las calles estaban este martes casi vacías, con apenas tráfico y las aceras llenas de nieve, que comenzó a caer esta madrugada tanto en la ciudad, la más poblada de Estados Unidos, como en el resto del noreste del país.
Al trabajo de las máquinas quitanieves se unía el de muchas personas que estaban intentando habilitar las aceras de sus edificios, en medio de una nevada intensa y vientos algo menos fuertes de los previstos inicialmente.
Las autoridades decidieron cancelar la alerta meteorológica por la tormenta de nieve que regía en la ciudad de Nueva York, pero se mantiene en efecto al norte y al oeste de la ciudad.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, tras una primera evaluación del impacto, decidió prohibir el tráfico de camiones en varias autopistas del estado desde las 9.00 hora local por los riesgos que representa la circulación.
Según los datos que proporcionó, hasta las 6.00 hora local el 99 % de los vuelos con origen o destino el aeropuerto de LaGuardia habían sido cancelados y en la terminal de JFK, la más importante del estado, la cifra alcanzaba los dos tercios.
Se mantiene en servicio el metro suburbano de Nueva York, que traslada a diario a seis millones de personas, aunque no funciona en los tramos al aire libre, e igualmente opera el servicio de autobuses urbanos.
No obstante, Cuomo anunció que si las condiciones empeoran, el servicio de autobuses en la ciudad de Nueva York quedará suspendido.
También anunció que el tren que conecta a Manhattan con los suburbios del norte de la ciudad quedará interrumpido a mediodía.
Se mantiene la alerta de inundaciones en partes del vecino estado de Nueva Jersey y en los distritos neoyorquinos de Queens y Staten Island.
El Servicio Meteorológico rebajó este martes la previsión de la nieve que se espera en la ciudad de Nueva York este martes desde los 20 centímetros iniciales hasta la mitad, aunque en los suburbios del norte de la ciudad y en los estados vecinos puede llegar hasta los 61 centímetros.
Se trata de una nueva revisión a la baja, porque inicialmente se había anunciado que en la ciudad caerían cerca de medio metro de nieve.
Todas las escuelas públicas en las ciudades de Nueva York y en Boston están cerradas, y el Gobierno del estado de Nueva York ha pedido que no vaya a trabajar el personal que no sea estrictamente necesario.