El alcalde en el exilio y responsable nacional adjunto de Voluntad Popular, David Smolansky, se reunió con el canciller de Brasil, Aloysio Nunes, para discutir la crisis de desplazados venezolanos en la frontera, así como denunciar la violación sistemática a los derechos humanos que sigue implementando el régimen de Nicolás Maduro.
“Primero quiero agradecer al Gobierno federal de Brasil por toda la atención y protección que ha brindado a miles de venezolanos que se encuentran en condición de refugiados. Muchos han sido rápidamente regularizados en el sistema migratorio, gozan de permiso de trabajo, han recibido atención médica, alimentación y techo”.
En este sentido Smolansky señaló que es urgente decretar una crisis de refugiados en la región, para lograr criterios similares para la inserción de los venezolanos inmigrantes en todos los países receptores, así como la creación de un fondo de cooperación multilateral para proveer de alimentación, salud, capacitación, techo y educación a millones de venezolanos desplazados desde México hasta Argentina.
El dirigente de la tolda naranja informó al canciller brasileño que el régimen de Nicolás Maduro no solo afecta a los venezolanos, sino también a los latinoamericanos, a través de la promoción de la economía criminal y la exportación de un modelo que coarta todas las libertades.
“Mientras más rápido salgamos de la dictadura, mejor para América Latina, mientras más se prolongue, mayores serán los problemas para la región”, sentenció Smolansky, quien le manifestó a Nunes la necesidad de ejercer sanciones individuales en contra de altos funcionarios del régimen involucrados en violación de derechos humanos, corrupción, lavado de dinero y narcotráfico.
Finalmente, el ministro de relaciones exteriores de Brasil se comprometió a seguir trabajando ante distintas instancias internacionales para continuar con la ayuda humanitaria, así como exigir la libertad plena de todos los presos políticos en Venezuela.