El líder opositor venezolano , Leopoldo López, arribó este fin de semana a 47 años de edad, el quinto cumpleaños bajo encarcelamiento y la desmesurada persecución política que ha desatado en su contra la dictadura de Nicolás Maduro. Pese a la violación recurrente de sus derechos humanos y fundamentales, López permanece firme en resistencia y pie de lucha por conquistar la libertad de Venezuela.
Como se recordara, en 2014 López se presentó ante la justicia injusta y ante cientos de miles de venezolanos, concentrados en la Plaza José Martí y las calles de Caracas, reiteró que el carácter intrínseco de su lucha basa en la crisis impulsada por el modelo equivocado impulsado por Nicolás Maduro, caracterizado por la constitución de un narcoestado, el enquistamiento de la corrupción al más alto nivel que hoy se evidencia incluso a través de la aprobación de un antejuicio de mérito contra Maduro por sus vinculaciones con el caso mundial de corrupción Odebrecht, con terribles consecuencias para el pueblo venezolano como el hambre, la profundización de la pobreza, interminables colas para adquirir productos básicos, escasez de alimentos y medicinas y una desbordada inseguridad pública ante la mirada impávida del régimen que desde ese momento ya definía como una dictadura.
El líder venezolano, nacido en Caracas el 29 de abril de 1971, es conocido mundialmente por su firmeza y convicción frente al régimen de Nicolás Maduro, convocando permanentemente al pueblo venezolano a “alzar su conciencia frente a una dictadura corrupta y hambreadora”, razón por la que fue sometido a un juicio que, en palabras del fiscal acusador Franklin Nieves, “fue amañado y ordenado por altos funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro, fabricando pruebas para condenarle a 14 años de prisión”.
Esto fue ratificado el 15 de febrero de 2018 por la Fiscal General de la República en exilio, Luisa Ortega Díaz, quien durante una entrevista radial desde Colombia afirmó recibir “presiones de Diosdado Cabello para incriminar a Leopoldo López en los asesinatos de Bassil Da Costa, Juan Montoya y otros hechos de violencia, sin prueba alguna”.
López no solo ha demostrado ante Venezuela y el mundo su gallardía, arrojo y liderazgo social y político en la lucha por el cambio que reclama la nación suramericana, también es uno de los dirigentes más preparados hoy por hoy en Venezuela. Es economista egresado con grado cum laude, en 1993, del Kenyon College en Ohio, Estados Unidos. Posteriormente asistió a la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, perteneciente a la Universidad de Harvard, donde obtuvo una Maestría en Políticas Públicas en el año 1996. En 2007 recibió un doctorado honoris causa en Leyes del Kenyon College y ha sido docente en la Universidad Católica Andrés Bello, en Venezuela.
Trabajé entre los años 1996 y 1999 en la hoy destruida estatal petrolera, Petróleos de Venezuela (PDVSA), ocupando los cargos de Analista, Asistente al Economista Jefe y Asesor Económico en la Coordinación de Planificación, etapa en la que forjó la idea de que el petróleo no es “el excremento del diablo”, sino un valioso insumo para apalancar y diversificar la economía venezolana e impulsar el progreso de su país.
Fue alcalde del municipio Chacao de Caracas desde el año 2000 hasta el 2008, luego de haber sido electo en el cargo por dos períodos consecutivos: 2000-2004 con el 51% de los votos y 2004-2008 con el 81%. Como alcalde de Chacao adelantó importantes obras para la modernización de la capital venezolana, las cuales hoy perduran en beneficio de los ciudadanos, como referencia de gestión nacional e internacional. Se le reconoce el haber transformado a Chacao en el municipio más seguro de toda Venezuela, constituyendo al cuerpo de policía más importante del país, antes de la reforma policial efectuada en 2009. En los años 2007 y 2008 recibió consecutivamente el Premio Transparencia, otorgado por Transparencia Internacional. En 2008 fue premiado como el Tercer mejor Alcalde del mundo, otorgado por City Mayors y World Mayors. En 2009 fue reconocido como la «Persona más innovadora en tiempos de adversidad», por la ONG Future Capitals.
López es activista fundador del partido político nacional Voluntad Popular (2009), del cual es Coordinador Nacional desde el año 2010, tras resultar electo en comicios abiertos generales donde participaron más de 150 mil personas. VP es conocido hoy en día como el partido más importante y firme opositor a la dictadura de Nicolás Maduro, en Venezuela, por lo cual su tarjeta ha sido inhabilitada por el régimen.
Tras ser inhabilitado políticamente en 2008 por el régimen de Hugo Chávez, para evitar su triunfo con más del 65% de los votos a la Alcaldía Metropolitana (el espacio de gobierno más importante en Venezuela luego de la presidencia de la República) y pese a que una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos restableció sus derechos políticos en 2011, dictamen que el régimen se negó a cumplir, López se avocó a recorrer cada parroquia, municipio y estado de Venezuela con el objetivo de organizar y movilizar al pueblo venezolano para la conquista democrática de su libertad frente a la dictadura que gobierna.
Tras convocar una jornada nacional de asambleas populares de calle para escuchar las propuestas de cambio de sus compatriotas, en 2014 fue arbitrariamente encarcelado por el régimen venezolano en una prisión militar por sus ideas y permanente llamado a restablecer la democracia. 3 instancias de la ONU, la OEA, el Parlamento Europeo, los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama y Donald Trump; premios nobel de la paz, presidentes, expresidentes y líderes mundiales, así como organizaciones defensoras de las libertades y derechos humanos han propugnado su inocencia y exigido incansablemente su libertad. Fue declarado en 2014 preso de consciencia por Amnistía Internacional. Tras un juicio viciado donde fueron violados todos mis derechos fundamentales, actualmente permanece injustamente bajo arresto domiciliario, cumpliendo una infame condena a 14 años de prisión, que ha sido repudiada permanentemente por toda la comunidad internacional que sigue abogando por su libertad.
Por la lucha democrática que Leopoldo López ha impulsado en favor del pueblo venezolano, en el año 2017 fue galardonado con el Premio Sájarov 2017 a la Libertad de Conciencia, entregado por el Parlamento Europeo. El Premio Sájarov es el premio internacional más importante luego del Premio Nobel. Ese año también le fue otorgado el Freedom Award 2017 por el Gobernador de Florida – EEUU, Rick Scott. En 2014 fue distinguido con el Alumni Achievement Awards de la Universidad de Harvard. En 2015 el Ayuntamiento de Cádiz (España) le otorgó el Premio Libertad Cortes de Cádiz y en 2015 recibió el Premio Iberoamericano ASICOM de la Universidad de Oviedo, en España.
Pese a su encarcelamiento, López no ha dejado de pensar en cómo sacar el país adelante y construir esa Mejor Venezuela de la que tanto habla. Recientemente este preso de consciencia publicó el libro “Venezuela Energética, propuesta para el bienestar de todos los venezolanos”, el cual escribió en la cárcel de Ramo Verde, evadiendo en trozos de servilletas y otros medios los férreos controles de seguridad que le impone la dictadura. Allí plantea que la renta petrolera debe llegar directamente a cada venezolano a través de un Fondo Patrimonial, para que así no sean secuestrados, malversados y dilapidados los recursos por la corrupción de Estado. En 2016 escribió y publicó el libro “Leopoldo López: preso pero libre”, que resume sus vivencias en la prisión, y en 2011 había publicado “Venezuela, territorio seguro”, una propuesta integral para restablecer la deprimida seguridad ciudadana en su país, la cual es una extensión del “Plan 180”, propuesta previa publicada en 2008, cuando ejercía como alcalde de Chacao.
Pese a todos los riesgos y amenazas que representan ser un preso de la dictadura, incluso con una decisión judicial que le ha prohibido expresarse de manera alguna por medios convencionales y no convencionales, López ha llamado permanentemente a través de su partido Voluntad Popular a conquistar la libertad mediante la unidad de todos los sectores de la sociedad venezolana en un frente común y unificador contra la dictadura para lograr verdaderas elecciones presidenciales libres, justas y transparentes, así como afianzar la presión de la comunidad internacional sobre el régimen de Maduro, en aras de lograr una transición democrática que permita una solución a la terrible emergencia humanitaria de la nación suramericana, que es una de sus preocupaciones fundamentales durante cada día de prisión.
Desde su arresto domiciliario impulsó contundentemente, la participación de sus compatriotas en la consulta soberana del 16 de julio, en la que más de 7,5 millones de venezolanos expresaron su rechazo al fraude constituyente y pidieron a la Fuerza Armada ponerse del lado del pueblo y respetar la Constitución y elecciones libres y transparentes en 2017. También ha articulado y respaldado a través de Voluntad Popular los llamados de la oposición venezolana desde la Unidad y el Frente Amplio Venezuela Libre a exigir en las calles la salida de Nicolás Maduro del poder, a través de mecanismos constitucionales con el objetivo primordial de rescatar la democracia, defender la Constitución y avanzar urgentemente hacia una Mejor Venezuela en donde todos los derechos sean para todos los venezolanos y no para una cúpula corrupta.