El condado de Miami-Dade, en el sureste de Florida, reimpuso la obligación de llevar mascarilla en las instalaciones gubernamentales ante el alarmante repunte del covid-19 en el estado, medida que deberán cumplir empleados y visitantes.
«Las mascarillas se exigen (a partir de este miércoles) a empleados y visitantes en todos los espacios interiores públicos del condado, para protegernos» de un posible contagio de la variante delta, señaló en rueda de prensa Daniella Levine Cava, alcaldesa de Miami-Dade.
También es obligatorio su uso en los servicios de transporte público y aeropuertos bajo las regulaciones federales, añadió Levine Cava, quien alertó sobre el «enorme y alarmante» aumento de los casos de coronavirus en nuestra comunidad y el país.