El senador republicano Marco Rubio pidió este lunes 26 de octubre al presidente de EE UU, Donald Trump, que conceda a los inmigrantes venezolanos en el país el beneficio conocido como Salida Obligatoria Diferida (DED, en inglés), que los ampararía de ser deportados a su lugar de origen.
En una misiva, Rubio, quien preside el Subcomité de Relaciones Exteriores para el Hemisferio Occidental del Senado, animó al gobernante estadounidense a ejercer su «autoridad constitucional» para conceder una DED «a los nacionales venezolanos elegibles que residen actualmente en EE UU».
«Tal designación es consistente con – y promueve- las prioridades de la política exterior de su Administración con respecto a Venezuela, así como el apoyo a nuestros vecinos», puntualizó Rubio, quien es senador por Florida, uno de los estados clave en las elecciones del 3 de noviembre, con una importante población de venezolanos y cubanos.
Liberia es el único país que cuenta con ese beneficio migratorio que fue concedido en octubre de 2007 por el entonces el presidente George W. Bush, después de que venciera un Estatus de Protección Temporal (TPS) otorgado a la nación africana en 1991 debido a la guerra civil y de nuevo en 1999, cundo hubo un rebrote del conflicto.
Rubio, de origen cubano, señaló que ha abogado por un TPS para los venezolanos e indico que, en ausencia de ese amparo, EE UU debe asegurarse de no estar deportando «a personas de regreso a un país en el que el régimen ilegítimo de ( Nicolás Maduro) y sus fuerzas de seguridad llevan a cabo habitualmente asesinatos extrajudiciales, desapariciones y torturas de opositores políticos «.
«El DED provee una suspensión administrativa temporal de la expulsión para los nacionales de los países designados por el presidente», argumentó el senador.
Pese a admitir que no proporciona estatus permanente, destacó que permite al beneficiario «trabajar legalmente en el país durante la duración de la designación».
El pasado 16 de octubre, el senador demócrata Bob Menéndez denunció que el Gobierno de Trump se valió de terceros países para seguir deportando a migrantes venezolanos, una estrategia que le sirvió supuestamente para esquivar una prohibición de vuelos a Venezuela que él mismo decretó en 2019.
Menéndez, también de origen cubano y muy crítico con Maduro, afirmó que las deportaciones se produjeron al menos hasta marzo de este año y aseguró que los vuelos con origen en EE UU hancían escala en Trinidad y Tobago antes de llegar a Venezuela.
Para captar el voto venezolano, Trump, quien reconoció al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, ha decretado más sanciones y restricciones a Cuba y Venezuela; mientras que los demócratas del Congreso -entre ellos Menéndez- han pedido al Ejecutivo que otorgue a los venezolanos que viven en EE UU un TPS.
Tras conocer la propuesta de Rubio, Carlos Vecchio, representante diplomático de Guaidó ante el Gobierno de Trump, agradeció al senador y «a todos quienes elevan su voz por la protección de venezolanos en EE UU».
«Mientras salimos de la dictadura de Maduro, es necesario un mecanismo (TPS o DED) que permita vivir y trabajar legalmente a venezolanos en EE UU sin temor a ser deportados», afirmó Vecchio en su cuenta de Twitter.
Según la delegación diplomática de Venezuela ante la Casa Blanca, alrededor de 600.000 venezolanos residen en Estados Unidos en la actualidad, aunque el censo estadounidense de 2018 estimaba esa comunidad en 484.445 personas