Al menos unos 20.000 extranjeros radicados en Panamá han regresado a sus países en los últimos meses por la severa crisis económica derivada de la pandemia, que los dejó sin medios de vida en este país que hace unos años estaba entre los más pujantes de la región.
«La mayoría perdió su empleo y no tiene dinero ni para cubrir su alimentación», afirmó a Efe el presidente de la Asociación de Residentes y Naturalizados de Panamá (ARENA), Rafael Rodríguez, quien tildó de «masiva» la salida de los extranjeros.