La afamada marca, con más de 20 años en el mercado, apunta al mercado centroamericano

 

El diseñador venezolano visitó recientemente Panamá para ser parte de la edición 2018 del Fashion Week Panamá (FWP), que se celebró en el Centro de Convenciones Atlapa entre el 11 y 14 de octubre. Delfino participó como director creativo de Shalom, una marca textil venezolana con más de 20 años en el mercado.

“Vinimos a Panamá a dar a conocer la última colección de Shalom para poder lanzar la marca a nivel internacional. Esta última muestra, llamada Aromas, es la colección primavera/verano 2019 y está inspirada en el colorido de las flores del trópico”, explicó el también arquitecto y presentador de televisión.

Delfino detalló que para Aromas crearon cápsulas dedicadas a cinco estilos de mujeres, en la que cada una se sienta cómoda dentro de su propia piel.

“Tenemos una cápsula para las mujeres muy activas y deportivas, otras para la mujer un poco más relajada, una dedicada para aquella que se siente más sofisticada sin ser tan joven, otra más ejecutiva y cerramos con una after office. Lo mejor es que todas se pueden combinar sin problema”, explicó el especialista.

Idóneo

El Panamá Fashion Week, como vitrina, representó el punto de partida de la marca para apostar al mercado centroamericano, según explicó el Delfino, quien agregó que el Istmo que es el centro de distribución de la mercancía internacional para toda Latinoamérica.

“Estamos apostando a Centroamérica en este momento porque consideramos que es el espacio donde quizás la industrial textil esté menos desarrollada. Si bien México tiene un mercado bastante grande, de ahí hacia abajo la moda es mucho más doméstica, más pequeña”, sostuvo.

Destacó, que a pesar de la crisis económica, Shalom realiza sus diseños en Venezuela. Todo bajo un estricto control de calidad y con la participación de personal altamente calificado.

“Es un gran esfuerzo el que estamos haciendo y en donde la creatividad es fundamental para lograr los objetivos”, opinó.

Adaptación

La moda como tal no escapa de la realidad que actualmente atraviesa Venezuela, sin embargo, Delfino considera que está en un momento de renacimiento, y no de nacimiento.

“De renacimiento porque pienso que mientras más puertas se cierren a nivel de exportaciones, el venezolano tiene que reinventarse y buscar la manera de sentirse bien. Aquella generación de Giovanni Scutaro, Mayela Camacho, Ángel Sánchez u Óscar Carballo también se internacionalizó a raíz de otra crisis económica como la del Viernes Negro.

Por eso nosotros, la nueva generación, estamos apostando con un sello de calidad importante y con la capacidad a nivel de fábrica de poder asumir el reto a un target que también está desabastecido en Venezuela”, cerró.