El presidente Donald Trump dijo el miércoles que Irán parece estar «refrenándose» e indicó que ningún estadounidense o iraquí resultó herido en el ataque iraní con misiles balísticos el martes contra dos bases iraquíes que albergan tropas de Estados Unidos.
Hablando desde el vestíbulo de la Casa Blanca, Trump anunció que Estados Unidos impondrá inmediatamente nuevas sanciones a Irán «hasta que Irán cambie su comportamiento».
«Ningún estadounidense sufrió daños en el ataque de anoche por parte del régimen iraní. No tuvimos víctimas», dijo Trump. «Nuestras grandes fuerzas estadounidenses están preparadas para cualquier cosa».
Trump defendió el asesinato selectivo la semana pasada del general Qassem Soleimani, jefe de la élite de la Fuerza Quds de Irán. Indicó que los estadounidenses deberían estar «extremadamente agradecidos y felices» con el resultado.
El mandatario reiteró su posición de que «a Irán nunca se le permitirá tener un arma nuclear» y pidió nuevas negociaciones nucleares para reemplazar el acuerdo nuclear de 2015 del cual retiró a Estados Unidos.
Trump también anunció que le pediría a la OTAN que se involucre «mucho más en el proceso de Medio Oriente».
El martes Irán lanzó ataques con misiles contra soldados de Estados Unidos y de las fuerzas de la coalición en Irak en aparente represalia por el asesinato de Soleimani.
La base aérea de al-Asad en el oeste de Irak, que alberga algunas tropas estadounidenses, fue alcanzada por al menos una docena de misiles, según un funcionario de defensa estadounidense familiarizado con la situación.
