La detección temprana y el acceso al tratamiento antirretroviral son las herramientas fundamentales para erradicar en 2030 la epidemia del VIH en Latinoamérica, una región en la que 1,7 millones de personas viven infectadas por ese virus, según Onusida.
La epidemia en la región afecta principalmente a los hombres, con un estimado de 1.1 millones de individuos viviendo con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), además de cerca de 200,000 personas que están entre los 15 y los 24 años de edad, incluyendo a 40,000 niñas adolescentes y mujeres jóvenes.
Es así como, a pesar de que Latinoamérica es una de las regiones del mundo que tiene la cobertura más alta para el tratamiento antirretroviral con el 47 % de personas que viven con VIH, el pasado septiembre el subcontinente acordó un plan para poner fin al sida y a las infecciones de transmisión sexual (ITS) para 2030.
El acuerdo, que se alcanzó en EE.UU. en el 55 Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) prevé acelerar desde ahora hasta 2020 las medidas de prevención y tratamiento, con un plan que busca reducir en un 74 % los casos nuevos de VIH, disminuir en un 62 % las muertes anuales relacionadas con sida y bajar del 7 % al 2 % la proporción de niños que nacen con VIH.
Con estas metas en el horizonte, los países de la región llegan al final de 2016 con estadísticas en descenso en número de infectados (-17 %), menor número de niños que nacen siendo portadores del virus y descenso en el número de muertes relacionadas con el VIH (29 %).
A pesar de estos datos, en varios países las estadísticas son preocupantes y, por ejemplo, en Chile, según el Ministerio de Salud y un estudio de la Universidad de Chile, los contagios por sida aumentaron un 68,7 % en los últimos 10 años, hasta algo más de 30.000 casos confirmados.
Según ese informe, entre los 15 y 19 años el alza de contagios ha sido de 125 % en los últimos diez años, mientras entre los 19 y 24 años fue del 113 %.
Para los dos países más grandes del Cono Sur los datos también disparan alarmas, en Brasil unas 827.000 personas son portadoras del VIH, de las que 112.000 no saben que tienen la enfermedad y 260.000 lo saben pero no se tratan, según estadísticas divulgadas por el Ministerio de Salud brasileño.
Mientras, en Argentina viven alrededor de 126.000 personas con el VIH y de ellas, el 30 % no sabe que lo tiene, algo que, según el Programa Conjunto de Naciones Unidas sobre el SIDA (Onusida), genera un «doble impacto»: la aceleración del contagio y los diagnósticos tardíos, y provoca 1.600 muertes cada año en el país.
En Paraguay, por su parte, el Ministerio de Salud Pública informó que desde 1985 hasta octubre de 2016 se registran 16.635 personas con VIH, de las cuales un total de 5.023 son casos de Sida y en Uruguay, según reveló el Ministerio de Salud, se estima que existen 12.000 personas con VIH, de las cuales 10.000 desconocen su estado serológico.
En la región Andina, Perú encabeza la lista de portadores del VIH con 72.000 casos, de los cuales 26.000 desconocen su diagnóstico, según informó la coordinadora de la Estrategia Sanitaria Nacional de Prevención y Control de Infecciones de Transmisión Sexual y VIH y Sida, Patricia Segura.
Igualmente, el Gobierno venezolano reportó a 63.328 personas que «reciben gratuitamente tratamiento antirretroviral por haber contraído el VIH» (cifras oficiales) y el Ministerio de Salud de Ecuador informó de 3.294 nuevos casos de VIH, sumados a los 35.159 personas que vivían con el virus en 2015.
El Instituto Nacional de Salud (INS) de Colombia dijo que, en lo que va corrido de 2016 en Colombia se han reportado 11.532 casos de VIH de los cuales 9.233 son portadores del virus, 1.628 han desarrollado sida y 671 han muerto.
En Centroamérica y el Caribe, el país que muestra un mayor número de casos de VIH es la República Dominicana donde hay unas 69,000 personas infectadas de las cuales 40,000 reciben tratamiento, según los últimos datos del Consejo Nacional para el VIH y el Sida (Conavihsida).
Guatemala, con 47.800 infectados, busca, según su entidad de Salud, dar tratamiento a 24.000 casos para diciembre de 2016 a la par que en Honduras las autoridades sanitarias registran más de 32.000 personas contagiadas, mientras que organizaciones no gubernamentales calculan que la cifra supera los 34.000 casos.
El Salvador registró alrededor de 20.000 infectados, de los que 1.000 son menores de 15 años, según el último informe de Onusida, y en Panamá se reportan oficialmente 13.847 casos para 2016 de los cuales 8.749 recibe tratamiento gratuitamente.
Según datos oficiales, en Costa Rica hay unas 7.000 personas que viven con VIH, pero destaca el dato de que en ese país llevan tres años consecutivos sin registrar nacimientos de niños con esa enfermedad.
Finalmente, en Norteamérica, México reportó, de acuerdo con el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de VIH y SIDA, 12.083 casos nuevos, y en Estados Unidos, según las cifras más recientes de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, hay más de 1,2 millones de casos, de los cuales uno de cada ocho no lo sabe.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) creó para la conmemoración del Día Mundial de la Lucha contra el Sida en 2016, el eslogan «Acepta el reto. Terminemos con el sida». Un reto que de ser alcanzado terminará en 15 años con la epidemia del VIH. Ahí está el reto.