Los periódicos panameños afectados por la inclusión del Grupo Waked en la lista Clinton pidieron este lunes a Estados Unidos que tome acciones para evitar su desaparición, a un mes de vencerse una licencia que les permite operar temporalmente.
Los directivos del legendario diario La Estrella de Panamá y el tabloide El Siglo expusieron en una rueda de prensa su preocupación porque no conocen lo que sucederá con la empresa después del 5 de enero de 2017, cuando caduca la autorización del Departamento del Tesoro de EE.UU.
«El anuncio que hacemos hoy es dirigido al Gobierno y a la Embajada de Estados Unidos, porque entendemos que está en la administración del Tesoro de ese país la suerte de estos periódicos», dijo el presidente del Grupo La Estrella y El Siglo (GESE), Eduardo Quirós.
El pasado 5 de mayo, el dueño de GESE y del Grupo Waked International S.A (WISA), Abdul Waked, fue incluido por el Tesoro estadounidense en la lista Clinton sobre blanqueo de capitales, lo que impide que ciudadanos y empresas estadounidenses tengan relaciones comerciales con él y 68 empresas asociadas.
La medida implicó la muerte comercial para la mayoría de estos negocios, entre ellos los diarios, que a pesar de haber recibido una licencia que permitió sus operaciones se vieron afectados por la incertidumbre sobre su futuro y obligados a recortar espacios y personal.
A 30 días de la fecha límite, indicó este lunes Quirós, la única información que ha tenido GESE acerca de su panorama es la posición pública del presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, quien ha indicado que el Gobierno hará lo posible por mantener los puestos de empleo, sin tomar acciones concretas.
El directivo recordó que el embajador estadounidense en Panamá, John Feeley, señaló públicamente que los periódicos no han sido objetos de ningún tipo de investigación.
En su momento el diplomático dijo que la licencia es un oxígeno para los diarios, a los cuales EE.UU. no quiere afectar porque sabe que la libertad de expresión es fundamental para la democracia.
GESE se ha visto obligado a aplicar recortes de personal, contenido y periodicidad de algunas publicaciones, y se han visto afectados por la drástica disminución de anunciantes, recordó Quirós.
Para mostrarle al país el poco tiempo que les queda y el significado de su posible desaparición, La Estrella de Panamá, fundada en 1853, y El Siglo iniciaron este lunes una campaña por la cual taparán los espacios de su portada con recuadros negros que se expandirán con el pasar de los días.
El Colegio Nacional de Periodistas de Panamá, el Consejo Nacional de Periodismo y el Fórum de Periodistas para la Libertad de Prensa e Información mostraron este lunes su respaldo al grupo editorial por lo que consideran un ataque a la libertad de expresión e información.
El director de La Estrella, Gerardo Berroa, indicó además que lo que le ha pasado a los diarios afecta el derecho a la información de los ciudadanos.
«Estamos injustamente incluidos en una lista, es un atentado contra la libertad de expresión y opinión; lamentamos que el Gobierno se haya lavado las manos en ese sentido y no haya apoyado adecuadamente y defendido los intereses panameños de un patrimonio nacional como este medio de comunicación», añadió.
Berroa sostuvo que Abdul Waked no venderá los periódicos, como ha sucedido con otras de sus empresas, que han tenido que ser vendidas o colocadas en un fideicomiso para dejar por fuera a su dueño y permitir que funcionaran alejadas de las sanciones de EE.UU.
Waked no enfrenta cargos en Estados Unidos y el Ministerio Público de Panamá, después de investigarlo y no encontrar pruebas en su contra, pidió un sobreseimiento del caso el pasado noviembre.