David Alejandro Chacón
El movimiento migratorio resulta de la suma de entradas y salidas de extranjeros en determinado país.
Las entradas no necesariamente significan que el extranjero llegó para quedarse. Puede ser por conexión hacia otro destino, trabajo, turismo, entre otras categorías.
Desde 2010 hasta el 2022, Estados Unidos encabeza el movimiento migratorio de Panamá. Solamente en 2022 fue de 824 mil 117, con 434 mil 826 entradas y 389 mil 291 salidas, según cifras oficiales de Migración Panamá.
Entre los años citados (2010 al 2022), el movimiento migratorio más alto de Venezuela se registró en 2016 con 629 mil 880 personas, a razón de 342 mil 946 entradas y 286 mil 934 salidas.
De ahí en adelante y en gran parte por la imposición de visa de turismo a los venezolanos a partir de 2018, el movimiento migratorio bajó considerablemente, pues en 2017 fue de 524 mil 120, 2018 con 292 mil 908, en 2019 subió un poco más hasta 370 mil 062 y en 2020, con la pandemia, quedó por debajo de las 100 mil personas por primera vez desde 2010 con un total de 94 mil 886.
Con la apertura gradual del país, en 2021, entraron y salieron de Panamá un total de 128 mil 442 venezolanos, la cifra más alta entre las nacionalidades después de Estados Unidos y Colombia.
En 2022, con el país abierto por completo en sus fronteras, el movimiento migratorio de venezolanos fue de 196 mil 946, cuarta nacionalidad con mayor actividad después de Estados Unidos, Colombia y Costa Rica.
Hasta julio 2023, el movimiento migratorio de venezolanos era de 109 mil 905, debajo de Estados Unidos (614 mil 176), Colombia (390 mil 777), Costa Rica (190 mil 209), Alemania (148 mil 104) y Canadá (121 mil 961).
