Decenas de venezolanos se aglomeraron en el consulado en Chile en Caracas con la esperanza de tramitar la “Visa de Responsabilidad Democrática” aprobada por el gobierno de Sebastián Piñera y que entró en vigencia este lunes.
La medida buscar ordenar la creciente migración de venezolanos Chile a través de un permiso de residencia temporal por un año, que debe ser tramitado en suelo venezolano.
Para los ciudadanos consultados por la Voz de América en Caracas esta visa es un nuevo obstáculo que enfrentan para escapar de la crisis en su país.
“Lo veo como una restricción para la gente que está haciendo esto ahora, quizás es un apoyo a largo plazo, pero ahorita la gente que tiene pasaje no le dan respuesta”, dijo Belkis Fernández.
Antes de la reforma, la legislación chilena permitía a aquellos que ingresaran a ese país como turistas, solicitar residencia temporal o definitiva desde Chile.
Francis Rondón vendió todo en Venezuela para irse el 11 de mayo. Hoy su proceso es incierto.
“Tenemos los pasajes para el 11 de mayo y ahora con esta nueva resolución estamos atados, (…) teníamos todo listo, que vamos a hacer yendo como turista (…) estábamos esperando nada más el momento de partir con una esperanza nueva, estamos en el aire, necesitamos una ayuda”, dijo Rondón.
Yaremy Rojas, desesperada asegura necesita viajar a Chile por un tiempo indeterminado para atender a su hija diagnosticada con cáncer.
“Mi hija tiene cáncer y está muy mal y me llamaron y me dijeron que me tenía que ir rápido (…) yo tengo que atenderla a ella, pero me dicen que me tengo que ir como turista y que a los 90 dias me tengo que regresar, no son 90 días y sí son 4 meses. No sé qué voy a hacer», dijo Roja, cuya hija huyó de Venezuela en octubre forzada por la escasez de medicamentos.
De acuerdo cifras oficiales del gobierno chileno, tan solo en 2017 ingresaron 164.866 mil personas de nacionalidad venezolana frente a 86.581 en 2016.
En febrero pasado el presidente venezolano, Nicolás Maduro, reconoció que existe una migración forzada, pero alega es producto de la supuesta “guerra económica”.