Ambos sectores hacen votos por la reconciliación nacional, para ello es fundamental la expresión ciudadana y la conformación de un frente que integre a todos los grupos que piden un cambio en la conducción política
Los venezolanos quieren expresarse. Las movilizaciones y demás actividades de calle no son suficientes para quienes demandan un cambio en la conducción política. El anhelo del voto universal y secreto sigue presente, por esta razón, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) organizó una Consulta Popular este 16 de julio para preguntarle a la ciudadanía si acepta o no la propuesta de Constituyente adelantada por el gobierno de Nicolás Maduro.
Son tres las interrogantes que se someterán a consideración de los electores: ¿Rechaza y desconoce la realización de una asamblea nacional constituyente propuesta por Nicolás Maduro sin la aprobación previa del pueblo venezolano?, ¿Demanda a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana obedecer y defender la Constitución del año 1999 y respaldar las decisiones de la Asamblea Nacional?, y ¿Aprueba que se proceda a la renovación de los Poderes Públicos de acuerdo con lo establecido en la Constitución, así como la realización de elecciones y la conformación de un nuevo gobierno de unidad nacional? Solo las opciones Sí y No aparecerán en el boletín.
La iniciativa de Maduro desató no solo las críticas de sus adversarios tradicionales, sino de quienes en el pasado estuvieron muy cercanos al fallecido mandatario Hugo Chávez. Un movimiento denominado “chavismo crítico” ve con preocupación la intensificación de la crisis si se llega a modificar la Carta Magna de manera inconsulta.
Después de años de severas diferencias, oficialistas y opositores llegan a un punto en común: la defensa de la institucionalidad y el respeto a la democracia como garantías de la sana convivencia.
“La consulta es constitucional”
Gabriela Ramírez se define como revolucionaria. Entre 2007 y 2014 estuvo al frente de la Defensoría del Pueblo. No oculta su admiración por Chávez, y por ello alzó su voz ante las pretensiones del Ejecutivo de cambiar totalmente el texto fundamental.
Ha sorteado toda clase de señalamientos provenientes de quienes alguna vez compartieron ideología con ella. A quienes la atacan los invita a “abandonar el amor por el partido y ponerse del lado del pueblo. El chavismo originario debe rebelarse contra la Constituyente”.
Afirmó que el proceso de este fin de semana es legítimo porque está contenido en el artículo 70 de la Constitución vigente. “Hasta las decisiones de los cabildos abiertos son vinculantes”, precisó.
Enfatizó que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) le dio el poder a una sola persona-Maduro- para transformar la Carta Magna. Advirtió un escenario de mayor confrontación si se materializan los comicios del 30 de julio. “Tengo fe infinita en que no se celebre ese proceso porque iríamos directo al caos, a la anarquía en el país”.
Agregó que quienes están en el poder actualmente deben reflexionar. “No somos monarcas. Toca bajarle la cabeza al pueblo para reencontrarnos”, concluyó.
Pidió a la oposición revisar el contenido de las preguntas 2 y 3 para garantizar la pluralidad en la consulta.
“Visibiliza a la mayoría”
El analista político y consultor John Magdaleno indicó que lo más significativo del proceso de este fin de semana es que visibiliza a la mayoría del país que aspira una renovación en los destinos de la nación.
“Si el número de participantes supera los 8 millones puede considerarse exitosa, sería una evidencia de quienes quieren un cambio frente al autoritarismo”, subrayó.
Pese a que la jornada no tendrá el apoyo logístico y organizativo del Consejo Naciona Electoral (CNE), es legítima porque goza de consentimiento social y fue aprobada en el seno del Poder Legislativo.
“Si amplia el ámbito de acción y es democrática, ¿cuál es el problema? El chavismo intenta desacreditar la iniciativa con un discurso conservador, hipócrita y reaccionario, regresivo de las libertades civiles y políticas”, dijo.
Sentenció que la fotografía a partir del 17 de julio debe reflejar a una ciudadanía organizada y articulada, y sentar las bases para la conformación de una coalición que incorpore al chavismo decepcionado de Maduro.
“Esa coalición tiene que avanzar en la disminución de la rivalidad que permita un clima político de inclusión, que todos se sientan representados: los estudiantes, los militantes de partidos, quienes no estén inscritos en toldas, las iglesias, por citar algunos sectores”, manifestó.
Reacción oficial
El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en voz de su directivo, Pedro Carreño, anunció acciones legales para suspender la consulta popular. A juicio del también diputado ante la Asamblea Nacional (AN) “ese plebiscito solo tiene la intención de echar andar un plan golpista».
Al cierre de esta edición, Carreño no había ejercido el recurso de nulidad para frenar el proceso adelantado por la oposición venezolana. Sin embargo, la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) giró instrucciones para que las emisoras radiales y plantas televisivas evitaran denominar la iniciativa como Consulta Popular.