América Latina se prepara para la temporada de promociones y descuentos más importante del año donde se combinan varias festividades que consisten en reactivar la economía de la región a través del ecommerce.

Black Friday que es una tradición estadounidense que ocurre el último viernes de noviembre que corresponde en esta edición al 29 de noviembre, y el Cyber Monday, relacionado con el lunes posterior al Día de Acción de Gracias, que ocurrirá este 2 de diciembre. ​

De acuerdo con Statista, en Latinoamérica el Black Friday es una de las fechas más importantes y que cada año se consolida, en especial en los mercados de Brasil al alcanzar 229,4 millones de dólares, seguido de Argentina con 161,1 millones de dólares, en tercer lugar, se encuentra México al registrarse un gasto de 159,8 millones de dólares, Colombia con 135,9 millones de dólares y Perú con 122,2 millones de dólares, en cifras del 2021.

Steffy Hochstein, Digital Director en another, la agencia de comunicación estratégica con la mayor oferta de servicios en América Latina, los usuarios esperan estrategias que resalten y conecten con las expectativas de los compradores, en lugar de saturarlos.

Para el sector de comercio electrónico, esto significa no solo ofrecer descuentos atractivos, sino también garantizar una experiencia de compra sin fricciones que inspire confianza y fidelidad en la marca.

  • Ofrecer garantías y opciones de devolución sencillas: El temor a recibir productos que no cumplan las expectativas sigue siendo una de las principales barreras. Asegurarse de que los consumidores puedan realizar devoluciones fácilmente o recibir garantías en caso de daños mejora la confianza en la marca.
  • Diversificar los métodos de pago: Los compradores valoran opciones de financiamiento como pagos a meses sin intereses y métodos de pago seguros, incluidos biométricos y autenticaciones. Estas opciones incrementan la probabilidad de compra, y facilitan una experiencia de usuario positiva.
  • Optimizar la estrategia omnicanal: Ofrecer promociones integradas en ambos canales y facilitar la transición de la compra en línea a la recogida en tienda puede ser una excelente manera de captar y retener clientes.
  • Utilizar datos para personalizar las promociones: La sobreabundancia de opciones puede desmotivar al consumidor, por lo que es esencial personalizar los anuncios para cada segmento de audiencia, mostrando solo productos o servicios que realmente les interesen.

En un escenario de saturación publicitaria, resulta crucial para las marcas contar con el apoyo de una agencia de comunicación estratégica especializada en gestión de crisis y relaciones públicas. Esta colaboración puede ayudar a garantizar que la publicidad no solo sea efectiva, sino también cautelosa, respetando la frecuencia de exposición para evitar el desgaste de la marca. En palabras de Hochstein, una estrategia de comunicación que entiende y respeta los límites del consumidor es clave para mantener una imagen positiva en un entorno tan competitivo.

Con la ayuda de un equipo de expertos en marketing, las empresas pueden asegurarse de maximizar sus esfuerzos y optimizar la experiencia de usuario, evitando así que la saturación de anuncios se convierta en un obstáculo.