El Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) lanzaron dos operaciones de financiación por US$ 800 millones para atender la integración socioeconómica de la población de migrantes venezolanos en Colombia.
“Hoy se marca un hito histórico, porque hoy el BID y el Banco Mundial van de la mano, no como competidores, sino como entidades que complementan sus esfuerzos financieros y de cooperación técnica. Son US$ 800 millones de financiamiento de largo plazo para la política pública integral de atención a los migrantes”, aseguró el presidente Iván Duque en el evento de lanzamiento de los dos proyectos de inversión.
El mandatario agradeció a los gobiernos de Estados Unidos, Canadá, Suecia, España, Japón y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), por el acompañamiento que han dado a Colombia para la atención a la crisis migratoria.
“Lo que ha hecho Colombia acogiendo a 1,8 millones de migrantes es el más importante gesto de paz y de protección de los derechos humanos que pueda tener un país en nuestra región. Sabemos que políticamente estas decisiones siempre traen impopularidad, pero es que estas medidas y el gobernar por principios no se rigen por encuestas y popularidad, sino por estar en el lado correcto de la historia, hacerlo moralmente y dar esperanza a quienes lo han perdido todo”, agregó el Mandatario
Más de 5.9 millones de venezolanos han abandonado Venezuela desde 2015, lo que lo convierte en el segundo éxodo activo más grande de migrantes y refugiados en el mundo, después de la crisis de refugiados sirios, y pronto podría convertirse en el más grande.
Las operaciones
Por parte del Banco Mundial se aprobó un préstamo por US$500 millones con el fin de apoyar la estrategia del Gobierno Nacional en la integración de migrantes venezolanos.
Se trata del primer préstamo de políticas de desarrollo, centrado exclusivamente en la migración transfronteriza, con el foco puesto tanto en la integración de la población migrante en condiciones de vulnerabilidad, como en las áreas de acogida.
El préstamo será complementado por una contribución de US$26,4 millones del Mecanismo Global de Financiamiento Concesional (Gcff, por sus siglas en inglés), que corresponden a recursos no reembolsables.
Esta operación respaldará el Estatuto Temporal de Protección, una política migratoria del Gobierno colombiano que permite regularizar a los migrantes venezolanos, integrarlos a la sociedad y ofrecer acceso a salud, inclusión financiera, servicios de protección y trabajo formal.
Mientras tanto, el BID aprobó un crédito por US$300 millones, que incluye, además, US$17.589.000 no reembolsables gestionados por la entidad a través del Mecanismo Global de Financiamiento (GCFF).
El programa buscará beneficiar a los migrantes venezolanos con foco en los que se estima tienen la necesidad de regularizar su estatus migratorio. Su regularización les permitirá acceder a los servicios sociales, de protección y de certificación de competencias laborales que, según un estudio de evaluación conducido por el Banco, ayudarán a mejorar sus ingresos y el acceso a trabajos formales.
Este proceso también beneficiará a las poblaciones de acogida, al promover políticas que fortalecerán las capacidades de coordinación y de intercambio de información entre organismos públicos.
Esta operación se encuentra alineada con la Visión 2025 – Reinvertir en las Américas: Una Década de Oportunidades, creada por el BID para lograr la recuperación y el crecimiento inclusivo de América Latina y el Caribe, con foco en reactivar el sector productivo, promover el avance social, fortalecer una buena gobernanza e instituciones adecuadas, y la igualdad de género y diversidad.