La ministra de Comercio de Colombia, María Claudia Lacouture, afirmó hoy que la petición de Panamá para que la Organización Mundial del Comercio (OMC) sancione comercialmente al país con 210 millones de dólares por incumplir un fallo del organismo en materia de aranceles a los textiles «no tiene fundamento».
«No tiene fundamento porque si miramos la controversia basada en los aranceles mixtos Colombia cumplió. Panamá está tratando de ejercer el derecho que tiene a las diferentes apelaciones ante la OMC, que lo puede hacer, pero no tiene fundamento», subrayó Lacouture en un encuentro con periodistas internacionales en Bogotá.
El pasado 13 de febrero, el Gobierno de Panamá solicitó a la OMC autorización para imponer sanciones comerciales a Colombia por 210 millones de dólares por considerar que Bogotá no cumplió el fallo de este organismo que le instó a retirar un arancel a importaciones de textiles, prendas de vestir y calzado panameñas.
La ministra aseguró que el Gobierno colombiano esta «cien por cien seguro» de que cumplieron la derogación del polémico arancel y señaló que el país solicitará la intervención del panel de cumplimiento.
«Panamá no puede llegar a la OMC a decir que va a pedir una compensación, tiene que ser el panel quien determine si cumplimos o no», subrayó.
El conflicto entre ambos países se inició en 2012, cuando Colombia empezó a aplicar aranceles del 10 % a los calzados y textiles y un cargo de cinco dólares por cada contenedor procedente de la panameña Zona Libre de Colón (ZLC) por lo que Panamá acudió a la OMC, cuyo fallo fue apelado por Colombia, aunque sin éxito.
El Gobierno colombiano sustituyó el pasado 2 de noviembre el arancel por dos decretos que, a su juicio, cumplen el fallo de la OMC y que, en opinión de Panamá, endurecen el control aduanero y suponen nuevas restricciones al acceso en el mercado colombiano de vestido y calzado reexportado por la ZLC.
En este sentido, la titular de la cartera de Comercio Industria y Turismo de Colombia agregó que el Gobierno colombiano «sigue creyendo» en la búsqueda de una buena relación con Panamá que contemple el intercambio de información aduanera que permita luchar contra el contrabando y la subfacturación.
Finalmente, Lacouture concluyó que «el tema» no es con Panamá sino con el contrabando técnico basado en la subfacturación, que a su juicio, implica a todos los países.