La Celac apoya el diálogo en Venezuela, pide a EE.UU el fin de las medidas contra ese país y condena la criminalización de la migración irregular, según el borrador de la declaración final de la V cumbre de ese foro regional que se celebra hoy en República Dominicana.
La Celac exige también la devolución a Cuba de la base militar estadounidense de Guantánamo y el fin «sin condicionamientos» del bloqueo económico de EE.UU a ese país, de acuerdo con la llamada Declaración Política de Punta Cana, a la que tuvo acceso hoy Efe.
El presidente dominicano, Danilo Medina, inauguró ayer esta cumbre en la localidad turística de Punta Cana que continúa hoy y a la que asisten un reducido número de mandatarios, ya que la mayoría han cancelado su participación alegando problemas de agenda.
«Apoyamos el proceso de diálogo nacional en la República Bolivariana de Venezuela» y alentamos a las partes «a retomar las conversaciones de buena fe y con alto compromiso constructivo y con pleno apego al Estado de derecho, a los derechos humanos y la institucionalidad democrática», dice el borrador.
Según confirmaron ayer varias fuentes diplomáticas a Efe, la solicitud de Venezuela de apoyo al diálogo despertó reservas entre varios países de la Celac, entre ellos Paraguay, y el debate sobre su inclusión en la declaración final duró varias horas.
El canciller paraguayo, Eladio Loizaga, dijo a Efe que su país no iba a apoyar un pronunciamiento a favor del diálogo en Venezuela a menos que se le exigiera al Gobierno de Nicolás Maduro «compromiso democrático».
Las negociaciones entre el Gobierno venezolano y la oposición política entraron en diciembre en una «fase de revisión» porque ambas partes se acusaron de incumplir los acuerdos.
Sin embargo, el viernes pasado los mediadores internacionales, 3 expresidentes hispanoamericanos, les entregaron un plan de trabajo propuesto por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Vaticano para relanzar el proceso de diálogo.
Los mandatarios reunidos hoy en Punta Cana también consensuaron exigir la derogación del «Decreto Ejecutivo de los Estados Unidos de América aprobado originalmente el 9 de marzo de 2015», que dicta sanciones económicas contra funcionarios venezolanos, y la devolución de Guantánamo, «un elemento relevante del proceso de normalización de relaciones entre ambos países» iniciado en 2014.
En la primera reunión de la Celac tras la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, sin embargo este foro multinacional no se refiere a las políticas proteccionistas del nuevo presidente estadounidense ni a sus amenazas y se limita a hacer un alegato contra la criminialización de la migración irregular.
«Compartimos una visión integral de la migración internacional basada en un enfoque de derechos humanos que rechaza la criminalización de la migración irregular, así como todas las formas de racismo, xenofobia y discriminación contra los migrantes», de acuerdo con el borrador.
Los mandatarios también saludan «la decisión de algunos gobiernos de eliminar políticas migratorias discriminatorias y selectivas que afectan los flujos migratorios en la región, en referencia a la política de «pies secos, pies mojadas», que Obama derogó antes de abandonar la Casa Blanca y que daba privilegios a los migrantes cubanos.
Aunque se trata de una de las cumbres con menos asistencia de mandatarios, la Celac pide fortalecer la «unidad» para enfrentar «los riesgos e incertidumbres que se ciernen sobre la economía de la región y a nivel global, entre estos la volatilidad del mercado financiero internacional y el proteccionismo».
En el documento, la Celac pide además fortalecer la cooperación policial y judicial, la lucha contra la evasión fiscal y hace un «llamamiento a los países desarrollados para cumplir con el compromiso de destinar el 0,7% de su ingreso nacional bruto a la Ayuda Oficial para el Desarrollo (AOD)».
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, fue el último en llegar hoy a esta cumbre en la que también participan los mandatarios de República Dominicana, Danilo Medina; Cuba, Raúl Castro; Ecuador, Rafael Correa; El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; Haití, Jocelerme Privert; Dominica, Charles A. Savarin; Guyana, David Granger, y el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness.
Los mandatarios de México, Chile, Panamá, Colombia y Guatemala cancelaron su participación ayer en el último momento.
Al término de la V Cumbre, la República Dominicana traspasará a El Salvador la presidencia temporal del organismo.