La última vez que Latinoamérica ganó la Serie Mundial de Pequeñas Ligas que se juega en Williamsport, Pensilvania, fue en el año 2000 con la Pequeña Liga Sierra Maestra (Venezuela) que dirigía el ya fallecido estratega Eduvino Quevedo.
Venezuela también ganó la versión de 1994, en este caso con la Pequeña Liga Coquivacoa. Los otros tres títulos de Latinoamérica los ganó México en 1957, 1958 y 1997.
En la versión 2019 le tocará el turno a la Pequeña Liga Cacique Mara, equipo que dirige el mánager Luis González. El equipo venezolano se proclamó campeón, con récord de 5-1, en el Latinoamericano que se jugó en Aguadulce, Panamá, donde además realizaron su proceso de visado para viajar a Estados Unidos.
“Aquí en Panamá nos han tratado muy bien. Gracias a Dios no solamente en este proceso, también cuando vinimos al Latinoamericano”, dijo González.
Sobre las fortalezas del equipo, González destacó que es como una familia. “Todos tienen talento. Todos sus ponen su granito de arena en cada partido y esa ha sido la clave. Tenemos buena defensa, ofensiva y lo mejor es el pitcheo”.
Concentración
El estratega venezolano agregó que la parte psicológica es clave en compromisos como la Serie Mundial, por eso han trabajado bastante en ese aspecto. “Vamos ante equipos muy fuertes, equipos que tienen grandes jugadores, pero estoy seguro que haremos un gran papel porque tenemos un gran material”.
¿Y qué deben mejorar? “La concentración. Muchas veces los muchachos, dependiendo del juego, pierden la concentración. Ya he hablado con ellos. Les he dicho que eso no puede pasar en torneos como el que vamos a jugar”.
El jueves 8 de agosto antes de viajar a Estados Unidos, el equipo venezolano realizó un entrenamiento en el estadio ubicado en el Parque Urracá.
De parte de toda la comunidad venezolana que hace vida en Panamá, queremos agradecer a Pequeñas Ligas Panamá y a su director Plinio Castillo por el apoyo brindado a nuestros muchachos. Les brindaron hospedaje y comidas.