El jueves 7 de marzo, a eso de la 1:00 pm, comenzó una de las peores pesadillas que ha podido vivir el pueblo venezolano en la etapa de la llamada “Revolución Bolivariana”, que fomentó el difunto de Barinas. Un “Mega Apagón” nacional, producto de años de desidia con el sistema eléctrico, afectó a casi todo el territorio venezolano.

Lo que parecía un “típico” racionamiento de dos o tres horas, se fue convirtiendo cada minuto en algo más que un apagón corriente de eso de los que ya está acostumbrado el resistente y noble pueblo. Cuando cerró esta edición, la tarde del martes 12 de marzo, todavía algunos sectores del país se encontraban sin el servicio eléctrico.

El panorama en todas las calles venezolanas era desalentador. Calles sin ley y con los propios “policías” y “militares” siendo parte de los saqueos que se registraron, sobre todo, en el estado Zulia. En Maracaibo, para más señas. El caos total, la desidia en carne propia.

Se quitaron la careta

Como si fuese poco el escenario, la Federación Venezolana de Fútbol (FVF), obligó a que se jugara la séptima jornada del Torneo Apertura 2019 el domingo 10 de marzo.

En Maracaibo, específicamente en el estadio “Pachencho” Romero, se enfrentaron Zulia FC y Caracas FC. Tras el pitazo inicial del principal Ronny Cuevas, los jugadores se dedicaron a quedarse en parados en el terreno de juego conversando. El juego al final fue suspendido.

El mensaje era claro y contundente: No estaban para jugar y mucho menos celebrar dada la situación del país. Las imágenes de ese momento dieron rápidamente la vuelta al mundo. Se les aplaudió el noble gesto que no replicaron en otras plazas. Lamentable, la verdad.

Por supuesto, la lluvia de críticas en Redes Sociales no se hizo esperar. La indignación de propios y extraños.

“Gracias a todos @Caracas_FC @Zulia_FC no era el momento para jugar, ni para arriesgar la salud de los jugadores. Imagínate si le hubiese pasado algo a un jugador! Para que clinica lo llevas? A una sin luz? Con que hielo calmas el golpe? Ah sí, no hay hielo”, escribió en su cuenta de Twitter Frank Feltscher.

Al cierre de esta edición, la FVF entró en razón y resolvió lo siguiente.

“El Consejo Directivo de la Federación Venezolana de Fútbol, ha decidido suspender todas las actividades programadas en Primera y Segunda División Torneo de Filiales y Superliga Femenina hasta que estén dadas la condiciones para la disputa normal de los encuentros programados en los Calendarios oficiales de la F.V.F.

La reanudación de los Torneos paralizados se producirá previa Resolución emitida por la F.V.F.