El gobierno de Brasil anunció que en los próximos 15 días reubicará a inmigrantes venezolanos que huyeron al estado norteño de Roraima.
Se estima que unos 40.000 venezolanos que huyeron del hambre y la inestabilidad en su país se han instalado en Boa Vista, la capital de Roraima, poniendo presión en los recursos y servicios del estado fronterizo con Venezuela.
La oficina del presidente Michel Temer dijo el miércoles que 350 migrantes serán trasladados a Sao Paulo y otros 180 a Manaus, y se estudia la reubicación en otras ciudades.
Los migrantes, tras ser vacunados contra el sarampión, la difteria y otras enfermedades, serán trasladados dentro de dos semanas.
El éxodo venezolano, cuya cifra puede ser más alta de la estimada, ha llevado a las autoridades de Roraima a exigir al gobierno federal acciones y recursos financieros para responder a la llegada de los venezolanos.
El pasado15 de febrero, el presidente Temer, reconoció en un decreto la «situación de vulnerabilidad» en Roraima por la cantidad de inmigrantes venezolanos allí.
Brasil y Colombia, como vecinos de Venezuela, han sido fuertemente afectadas por la creciente emigración venezolana. La situación fue tratada el miércoles (21 de febrero) por delegaciones de ambos países, encabezadas por los cancilleres: Aloysio Nunes de Brasil y María Ángela Holguín de Colombia.
Las naciones se comprometieron a mantener sus puertas abiertas para los inmigrantes venezolanos que huyen de la crisis política, social y económica en su país , al tiempo que expresaron nuevamente su deseo de «una pronta solución» a la situación que vive Venezuela.
El pasado 19 de febrero, Filippo Grandi, alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, dijo en un comunicado que prometió al presidente brasileño que pedirá a la comunidad internacional que ayude a brindar asistencia humanitaria para los refugiados venezolanos que cruzan la frontera en el norte de Brasil.
En 2017, inmigrantes venezolanos presentaron 17.130 pedidos de refugio en la Policía Federal brasileña.