Las tensiones entre Washington y Moscú siguen en aumento tras el reciente despliegue de tropas rusas a lo largo de la frontera con Ucrania.
La aseveración de un funcionario ruso de que Moscú no descarta un despliegue militar en Cuba y Venezuela en caso de que aumenten las presiones de Estados Unidos no estuvo en la mesa de la conversaciones que terminaron esta semana en Viena, y sería respondido «de manera decisiva», informó un alto funcionario estadounidense.
«Esto no se abordó en las conversaciones, si Rusia lo hiciera, actuaríamos de manera decisiva», dijo en respuesta a los reporteros el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, en una rueda de prensa el martes desde Washington.
Las declaraciones del funcionario estadounidense se produjeron después de que el viceministro de Exteriores, Sergei Ryabkov, que lideró la delegación rusa en las negociaciones del lunes en Ginebra, dijo el jueves en declaraciones televisadas que no podía confirmar ni excluir la posibilidad de que Rusia establezca una infraestructura militar en Cuba y Venezuela.
El gobierno interino de Venezuela, a través de un comunicado divulgado por la embajada y por su representante en Washington, Carlos Vecchio, rechazó «las declaraciones injerencistas del Kremlin».
“En lugar de contribuir a la recuperación de América Latina en la era pospandemia, el gobierno ruso busca trasladar su conflicto de Europa a las Américas”, indicó Vecchio, citado en el comunicado.