Estudiantes y docentes representantes de los centros educativos, ganadores de los primeros y segundos lugares y premios regionales de la cuarta edición del Concurso Nacional por la Excelencia Educativa, disfrutan de uno de los premios más esperados del concurso: el programa “Aventura con ciencia”, dictado por especialistas de la organización argentina “Expedición Ciencia”.
Desde el 9 de febrero hasta el 19 de febrero, 450 estudiantes disfrutan de un campamento al aire libre en El Valle de Antón. Es una experiencia de inmersión a la ciencia y el pensamiento científico en un marco de naturaleza y exploración de manera práctica y dinámica, dictado por investigadores científicos, biólogos, profesores de educación física, recreólogos y educadores con más de 15 años de experiencia en la materia.
El Doctor Gabriel Gellon, Director Ejecutivo de Expedición Ciencia y encargado del programa Aventura con Ciencia, indicó que los participantes han mostrado un gran entusiasmo por las actividades científicas que están realizando.
El programa logra que los participantes desarrollen las herramientas necesarias para encontrar respuestas a través del análisis, de la exploración, de conocerse y aprender de ellos mismos, de esta manera crean criterio propio y serán capaces de argumentar evidencias y armar el rompecabeza que nos presenta la vida cotidiana.
“La convivencia, el diálogo, la reflexión, la recreación, el disfrute de aprender y descubrir las respuestas a través de la exploración son claves centrales y nos permitirán que los chicos evidencien como el conocimiento no solo es importante sino también divertido y está en todo lo que los rodea”, acotó.
Según comentó la Lic. Adriana Ampudia, representante del Concurso Nacional por la Excelencia Educativa, “Aventura con ciencia es el único premio que hemos
repetido durante todas las ediciones del concurso, cada participante genera su propio aprendizaje a través de actividades que deben explorar y de una manera divertida, estudiando y aplicando la ciencia a través de experimentos, juegos y hasta recreación al aire libre acotó.
“Nos sentimos realmente complacidos porque estamos cambiándole a los estudiantes la manera de aprender a través del típico método de memorización sin análisis, ni comprensión; les estamos entregando las herramientas necesarias para que se sientan en la capacidad de razonar, de explorar, de confiar en ellos, teniendo experiencias que les permitan tener opiniones propias de cómo resolver no solo experimentos de ciencia sino también los retos que se les presentaran día a día”.
Este tipo de actividades refuerzan el enfoque de la Fundación para la promoción de la Excelencia Educativa, que busca mantener un proceso de mejora continua.
El Concurso Nacional por la Excelencia Educativa, se hace cada vez más sólido.
Luego de cuatro años, ha logrado generar una verdadera disposición a los procesos de evolución en la educación actual y ha permitido que los diferentes actores del sistema educativo entiendan la importancia de adecuar las formas de impartir el conocimiento para que alcancemos una educación de excelencia que es la base fundamental del desarrollo del país”, acotó.