El Abusador”, como lo bautizó el grandeliga Starling Marte, pertenece a los Tiburones de La Guaira en Venezuela. Foto: Cortesía.

 

No ha debutado en Grandes Ligas. Tiene apenas 19 años de edad y es oriundo de La Sabana, estado Vargas. Comenzó el año en la sucursal Clase A de los Bravos de Atlanta y terminó en Triple A. Se llama Ronald Acuña Jr.

2018 apunta en grande para el único venezolano que ha ganado el premio “Jugador del Año” en Ligas Menores, distinción que le otorgó en 2017 la prestigiosa revista norteamericana Baseball América.

Voy a repetirlo. Ningún criollo ha alcanzado tal distinción y eso ya es bastante decir si agregamos que es nacido en Venezuela, un país que ha exportado casi 400 peloteros a las Grandes Ligas, entre ellos figuras de la talla de Luis Aparicio, Miguel Cabrera, Omar Vizquel, José Altuve, entre otros.

Acuña es el prospecto número uno de los Bravos de Atlanta, según el portal oficial de la organización y número seis en todo el béisbol, solo superado entre sus compatriotas por la “vedette” de los Yankees, Gleyber Torres.

Diamante en bruto

Asumo que se estarán preguntando qué tiene de bueno este bateador derecho hijo del ex jugador profesional y prolífico bateador, Ronald Acuña. Su reporte de scouts habla por sí solo.

Lo comparan nada más y nada menos con un tal Andruw Jones, quien ganó 10 Guantes de Oro, un Bate de Plata y participó en cinco Juego de Estrellas durante 17 temporadas, en las que disparó más de 400 jonrones.

“Es un jugador muy atlético, con mucho músculo y aún así se puede desarrollar más”, dice el reporte, el mismo que evalúa las características de los jugadores del 1-60 y de Acuña agrega lo siguiente.

“En contacto con la pelota tiene 50. Es un aspecto en el que tiene que trabajar, pero la velocidad con la que saca el bate lo ayuda. Puede batear entre .260-.280 por temporada”.

En cuanto al poder, el reporte le da un 60, a pesar de algunas críticas. “Para su edad, la fuerza que tiene es una de sus mejores armas”, se lee.

A su vista le dan un 60, porque a pesar de ser un bateador de poder, siempre presenta buenos turnos exigiendo al lanzador. Por sus instintos para correr y robar bases, le dan un 60 también en su velocidad.

Por su defensa lo puntean con 55, porque si bien tiene las herramientas de un jardinero central, debe mejorar algunos aspectos precisos.

Por último, también le dan 55  por su brazo potente, pero aún con dificultades para tener el mismo impacto en diversos ángulos. Los cazatalentos consideran que no será problema en un futuro siempre y cuando siga desarrollando su instinto natural.

“Quiero jugar 20 años de beisbol y algún día ser un campeón bate”, le dijo Acuña al diario Líder en deportes.