Foto: NP / El Venezolano News

El diputado a la Asamblea Nacional, Rosmit Mantilla y la madre de Geraldin Moreno, Rosa Orozco, iniciaron una huelga en la sede de la Nunciatura Apostólica de Caracas, para pedir la libertad de todos los presos políticos, a un día de realizarse la tercera reunión de la Mesa de Diálogo, donde El Vaticano funge como acompañante.

Mantilla, estuvo detenido injustamente por dos años y medio, sin pruebas ni testigos que los inculparan en El Helicoide. Es defensor activo del movimiento pro inclusión LGTBI desde el partido Voluntad Popular. Fue liberado tras una intervención quirúrgica delicada el pasado 17 de noviembre y juramentado como diputado electo a la Asamblea Nacional.

Por su parte, Rosa Orozco, quien espera que se haga justicia en el caso del asesinato de su hija desde hace más de dos años, pide a todas las instancias nacionales e internacionales que se respeten los derechos humanos de los venezolanos.

Reseña una nota de prensa, Orozco ha emprendido una cruzada por la defensa de los derechos humanos en memoria de su hija. “A lo que más le tenía miedo, me lo quitaron: la vida de mi hija. Por eso hoy lucho porque ningún estudiante, ningún venezolano pase lo que pasó Geraldin. Todos tenemos derecho a exigir, a protestar y a pensar diferente. Yo perdoné a quienes asesinaron a mi hija, para que Geraldin fuese libre y porque todos tenemos que estar unidos para poder avanzar”.

Durante la noche de este domingo, Tintori, Antonieta de López y Mitzy de Ledezma, se encadenaron frente a la basílica de San Pedro en Roma para pedir la libertad inmediata de todos los presos políticos.

Actualmente, más de 100 venezolanos se encuentran detenidos por razones políticas. Suspensión de la visita familiar, violación del derecho al debido proceso, aislamiento, tortura psicológica han sido las denuncias presentadas por los familiares de los presos políticos quienes conforman un comité por la libertad y luchan a diario por la liberación de todos.