Panamá, que se encuentra en medio de una quinta ola de la covid-19, agregó 2.672 nuevos casos positivos del coronavirus y una sola muerte por la enfermedad, para llegar a 786.856 contagios confirmados y 8.192 defunciones en más de dos años de pandemia, dijo el Ministerio de Salud (Minsa).

Hay 16 pacientes hospitalizados por el coronavirus en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) y 122 en sala general, mientras que 12.402 permanecen aislados en sus hogares y 26 en hoteles, para un global de 12.566 casos activos.

Los enfermos que han sanado suman 766.098 desde el 9 de marzo de 2020 que se dio el primer caso de contagio en Panamá, donde la covid tiene una letalidad de 1,0%, que continúa como una de las más bajas en la región latinoamericana.

En las últimas 24 horas se aplicaron 12.361 pruebas para detectar casos de covid, que arrojaron una positividad de 13,3%.

Con respecto al proceso de vacunación, el informe del Programa Ampliado de Inmunización (PAI) del Ministerio de Salud da cuenta que desde el 20 de enero de 2021 en Panamá se han administrado 8.100.452 dosis de vacunas contra la covid-19, mayormente de la farmacéutica estadounidense Pfizer.

Las autoridades sanitarias han confirmado que Panamá enfrenta una quinta ola de la covid-19 empujada por la variante Ómicron y sus dos subvariantes BA 1 y BA 2, que se ha evidenciado en los últimos días por una intensa subida de los contagios y la positividad.

Este repunte pandémico ha hecho que el Ministerio de Salud reitere su llamado a la población a no relajar las medidas de autocuidado, sobre todo mantener el uso correcto de las mascarillas, el distanciamiento físico, lavado constante de manos, y acudir a vacunarse contra el coronavirus en los puntos establecidos.

La entidad sanitaria recordó asimismo que estar vacunado contra la covid-19 «no evita el contagio, pero protege ante enfermedad grave», según la información oficial.

El 28 de marzo pasado, tras una mejora en los indicadores, en Panamá el uso de la mascarilla en los espacios abiertos o al aire libre, una medida para frenar la pandemia de la covid, dejó de ser obligatorio, siempre que mantenga la distancia física de al menos un metro entre las personas.

Esta flexibilización, que se dio luego de una fuerte cuarta ola pandémica impulsada entre diciembre y mediados de enero pasado por la variante ómicron, se debió, de acuerdo con las autoridades, a la estrategia de vacunación, de trazabilidad, de bioseguridad y que la gente ha cumplido las medidas recomendadas.