En la imagen, el bateador designado y lanzador Shohei Ohtani, de los Angelinos de Los Angeles. EFE/John G. Mabanglo/Archivo

David Alejandro Chacón

@DavidChacon30

Primero que todo, gracias a Dios por la oportunidad de llegar nuevamente a los lectores a través de este espacio. Para Él es la gloria y la honra. El Tema Shohei Ohtani está de moda en las Grandes Ligas y no es para menos.

El jugador japonés de los Angelinos es, actualmente, el mejor jugador de todas las Grandes Ligas y por ende el mejor jugador de todo el béisbol. Y saldrán de una vez aquellos que dirán que soy un tipo de modas, pero voy con mis bases.

Mike Trout, antes de llegar a MLB Ohtani, era el jugador más completo del circuito. Muchos nombraban también a Mookie Betts, Fernando Tatis Jr. e incluso, Ronald Acuña Jr, todos con referencias más que aceptables para ocupar el sitial de mejor jugador del béisbol.

Ohtani llegó y los opacó. El japonés no solo es líder en Grandes Ligas en jonrones  con 32 (récord para un japonés en MLB), sino que además es muy buen abridor, con 4-1 en 13 aperturas, en las que ha dejado efectividad de 3.49 en 67 episodios.

¿Alguno de los anteriormente nombrados puede hacer eso también? No, ni cerca. Entonces, simplemente, el debate parece estar demás. Ohtani es hoy por hoy el jugador más completo del béisbol.

Otra cosa

Para muestra un botón. Miren lo que declaró Alex Cora, manager de Boston, sobre Ohtani.

“Estoy literalmente en shock por su talento. Deberíamos hacerle un nuevo premio. Esto es algo que la MLB no ha visto desde Babe Ruth… No es el mejor bateador. No es el mejor lanzador. Pero es el mejor jugador”.

Lo de Ohtani es tan increíble, que el martes 13 de julio, en Denver, se convertirá en el primer jugador en la historia de las Grandes Ligas en ser llamado para el Juego de Estrellas como lanzador y bateador. ¿Qué jugador actual puede contra eso?

Cuando Ohtani esté jugando, créanme, dejen lo que estén haciendo y vivan el privilegio de ver jugar a este pelotero de 27 años nacido en Oshu, Japón.

Al cierre de esta edición, Ohtani lideraba las Grandes Ligas en jonrones (32), tercero en remolcadas (69), primero en slugging (.700), segundo en OPS (1064) y por si fuese poco, se había robado 12 bases.