Reuters/La Patilla

Más de medio centenar de personas murieron este martes en un supuesto bombardeo químico en la localidad de Jan Shijún, en el norte de Siria, del que tanto el Gobierno de Damasco como la oposición se han culpado mutuamente.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de 58 fallecidos, entre ellos once menores, y de decenas de heridos por el ataque de aviones no identificados contra Jan Shijún, en el sur de la provincia septentrional de Idleb.

Por su parte, la Defensa Civil Siria, que presta servicios de rescate en áreas fuera del control de las fuerzas gubernamentales, afirmó que hubo 50 muertos y 250 heridos, la mayoría niños y mujeres.

Ambas fuentes destacaron que los heridos presentaban síntomas de asfixia, vómitos, espasmos y algunos echaban espuma por la boca.

De hecho, fotografías y vídeos publicados por activistas muestran imágenes impactantes de adultos y menores siendo atendidos en centros sanitarios y en la propia calle, donde los equipos de emergencia rociaban con agua a los afectados.

El presidente del opositor Consejo Local de Jan Shijún, Osama al Siada, dijo a Efe que aviones de las fuerzas gubernamentales bombardearon con gas cloro y gas sarín distintas áreas de Jan Shijún.

«Tres (bombardeos) fueron contra viviendas de civiles en el barrio del Norte y el cuarto, contra el centro de la población», indicó.

A su juicio, la gran cifra de muertos -45, según esta fuente- se debe a que «familias enteras se asfixiaron mientras dormían» cuando se produjo el bombardeo, a las 06.50 hora local (04.50 GMT).

Al Siada consideró que muchos perdieron la vida por la incapacidad de los hospitales de la zona de atender a todos los heridos, por lo que algunos perecieron antes de que pudieran recibir asistencia médica.

La fuente agregó que algunos casos fueron trasladados al Hospital de Idleb, en la capital de la provincia homónima, y al de Bab al Haua, en la frontera con Turquía, para desde allí ser llevados a centros sanitarios turcos.

El responsable de seguridad de la ONG francesa Unión de las Organizaciones de Socorro y Auxilio Médico (UOSSM), Ahmad Dbis, apuntó a Efe por teléfono desde Turquía que se han instalado carpas especiales para tratar a los afectados por el ataque en el paso de Bab al Haua, entre Siria y Turquía.

«De esos heridos, al menos 25 casos graves han sido trasladados después a hospitales en el territorio turco», reveló Dbis, cuya organización elevó a 100 muertos y 400 heridos el número de víctimas por el bombardeo.

Jan Shijún tiene unos 75.000 habitantes, muchos de ellos desplazados procedentes de la vecina provincia de Hama, y está bajo el dominio del Ejército Libre Sirio (ELS), de acuerdo a los datos proporcionados a Efe por el director del opositor Centro de Información de Idleb, Obeida Fadel.

Horas después del supuesto ataque químico, aviones de guerra volvieron a atacar un centro médico en Jan Shijún, que quedó fuera de servicio.

Fadel detalló a Efe por teléfono que el hospital Al Rahma de Jan Shijún fue objetivo de varios bombardeos de aparatos rusos y quedó fuera de servicio.
Fadel explicó que en ese centro no quedaban heridos del ataque anterior con sustancias químicas, porque habían sido trasladados a otras instalaciones sanitarias del norte de Siria y de Turquía.

Las reacciones tras el presunto ataque químico no se han hecho esperar y la Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza de la oposición, acusó a aviones gubernamentales de haber bombardeado Jan Shijún con proyectiles que contenían gas sarín.

Sin embargo, desde Damasco, una fuente militar siria de alto rango negó en declaraciones a Efe que las fuerzas leales al presidente Bachar al Asad o las rusas estén detrás del presunto ataque químico.

«Esas alegaciones son nulas y sin efecto. Ni los aviones sirios ni los rusos han empleado nunca armas químicas en su lucha contra el terrorismo», sentenció la fuente, que pidió el anonimato.

Asimismo, la Comandancia General de las Fuerzas Armadas sirias achacó en un comunicado a los «grupos terroristas y sus aliados» la responsabilidad del uso de sustancias químicas.

Desde Moscú, el Ministerio ruso de Defensa subrayó en otra nota que su aviación no ha efectuado ningún ataque en las proximidades de Jan Shijún.

El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá este miércoles de urgencia para analizar el supuesto ataque químico, a petición de Francia y el Reino Unido.

El Gobierno de Estados Unidos se ha sumado a las condenas e hizo hincapié en que esta acción «no puede ser ignorada por el mundo civilizado».

El ataque se produce pocos días después de otro similar denunciado por Médicos Sin Fronteras en la provincia de Hama, que dejó al menos 50 heridos sin que se determinara el tipo de agente toxico al que fueron expuestos.