Donal Trump, presidente de Estados Unidos, aseguró este martes que el líder norcoreano Kim Jong-un le dijo durante la cumbre en Singapur que Corea del Norte “ya está destruyendo sus principales centros de pruebas nucleares”.

Decisiones:

1. Ambos se comprometen a establecer nuevas relaciones de paz.

2- Corea del Norte reafirma su compromiso con la desnuclearización

3- Estados Unidos se compromete a garantizar la seguridad del régimen.

Primer encuentro

Este lunes 11 de junio los mandatarios Donald Trump y Kim Jong-un mantuvieron primeramente una reunión en privado de 45 minutos en la isla Sentosa, en Singapur. Posteriormente se unieron a sus respectivas delegaciones para continuar la jornada que culminó con un almuerzo de trabajo.

Los mandatarios se dieron un apretón de manos, una imagen simbólica y hasta hace poco inimaginable, tras décadas de tensiones provocadas por las ambiciones nucleares de Pyongyang.

Trump y Kim se estrecharon la mano durante varios segundos, hablaron unas palabras con el semblante serio, frente a una fila de banderas de sus países respectivos, en el lujoso hotel.

Tras esa escena, observada por millones de personas en todo el mundo, ambos líderes se dirigieron a una sala.
«Tendremos una relación fantástica, no tengo ninguna duda», dijo Trump, sonriendo junto a Kim. Por su parte el líder norcoreano reconoció que «no había sido fácil» llegar hasta aquí. «Los viejos prejuicios y prácticas fueron obstáculos en nuestro camino hacia adelante pero los superamos todos y hoy estamos aquí», aseguró.

Luego de su reunión cara a cara, que duró unos 45 minutos, Trump y Kim se encuentran con sus respectivos equipos de trabajo. Pero, a pesar del espectacular acercamiento diplomático de los últimos meses, persisten numerosas incógnitas respecto a la cumbre entre los dos dirigentes.

La reunión, cuyo objetivo es tratar la posible desnuclearización de Pyongyang, es la primera entre mandatarios de ambos países tras casi 70 años de confrontación a raíz de la Guerra de Corea (1950-1953) y 25 de negociaciones fallidas y tensiones a cuenta del programa atómico norcoreano.

En las horas previas a la cumbre, el presidente norteamericano expresó optimismo sobre las perspectivas de la primera reunión con el dictador norcoreano.