Consumidores compran productos en la calle 25 de Marzo, una vía comercial, hoy en el centro de Sao Paulo (Brasil). EFE/ Sebastiao Moreira

EFE. Ya es una realidad. Una segunda ola del nuevo coronavirus se está sintiendo en varios países y los gobiernos, según la gravedad de cada nación, está imponiendo restricciones movilidad.

La pandemia del coronavirus sigue mostrando una tendencia incierta en América, con un repunte de contagios en el Caribe y una estabilización en Estados Unidos y Brasil, los países más impactados del mundo por un virus que ya deja en el continente 13,6 millones de contagiados y casi 475.000 muertos (2 de septiembre)

La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que los fallecidos en el mundo ya sobrepasan los 850 mil y los casos globales confirmados mediante test de laboratorio alcanzaron los casi 30 millones.

Reino Unido

Un informe del Gobierno británico filtrado por la cadena pública BBC sugiere que en el «peor de los casos» el Reino Unido podría registrar desde julio hasta el próximo marzo 85.500 muertes por COVID-19.

El documento señala que si bien se podrían tener que introducir nuevas medidas de restricción a fin de contener la propagación del coronavirus, los colegios se mantendrían, probablemente, abiertos.

Ese informe ha sido elaborado por el grupo asesor científico Sage, que trata de ayudar al servicio público de sanidad de este país y a las autoridades locales de cara a los meses de invierno.

Por su parte, en declaraciones difundidas por el diario The Times, el ministro británico de Sanidad, Matt Hancock, sugiere que las medidas de restricción podrían no ser levantadas hasta pasadas las próximas navidades a fin de evitar un «repunte» en los casos.

Ese titular señaló que «una segunda ola es claramente visible en otras partes del mundo» y esto supone «una amenaza muy grave».

Hasta la fecha, no obstante, «en el Reino Unido nos las estamos arreglando para mantener estable el número de nuevos casos mediante la combinación de test y confinamientos locales», agregó.

Asia

Corea de Sur uno de los que mejor ha controlado la pandemia y que, además, no ha recurrido en ningún momento ni a confinamientos ni cierre de fronteras, ha venido registrando un importante repunte de contagios diarios desde el 14 de agosto, cuando la cifra superó las 100 infecciones diarias por primera vez en cinco meses.

El mayor brote actualmente está ligado a una polémica congregación presbiteriana ultraconservadora de Seúl, la Iglesia del Amor Máximo.

El mismo 15 de agosto, las autoridades decidieron que la región capitalina, donde viven unos 26 millones de personas (más de la mitad de la población nacional) adoptara el nivel 2 de distanciamiento social, cota que el resto del país adoptó también desde finales de la semana pasada.

El Gobierno central lleva días meditando si implementar, especialmente en la región de Seúl, el nivel 3 de distanciamiento, que prohíbe reuniones de más de 10 personas y recomienda el cierre de establecimientos como cines, salones de boda o cafés.

En Hong Kong se registró en julio una tercera oleada de contagios, por lo que las autoridades locales anunciaron nuevas medidas preventivas para evitar la propagación.

No obstante, la situación ha mejorado y las fuertes reglas impuestas, que incluían la prohibición de reuniones de más de dos personas, se han relajado.

Así, podrán abrir también clubes residenciales privados y salas de juegos, mientras que los restaurantes podrán servir cenas hasta las diez de la noche en lugar de las nueve como hasta ahora.