Más de 13 millones de electores están llamados a las urnas, 410.000 de los cuales residen en el exterior, para elegir entre 16 binomios a su presidente y vicepresidente, además de 137 miembros de la Asamblea Nacional y cinco representantes del Parlamento Andino.

El jueves se inició la primera jornada de votación adelantada para 8.300 privados de libertad, y el viernes prosiguió el sufragio bajo la modalidad de Voto en Casa para mayores de 50 años y personas con discapacidad física del 75 por ciento.

En Ecuador también pueden votar 22.429 extranjeros con residencia legal, y para los ecuatorianos que residen en el exterior se instalarán 936 mesas de votación en tres circunscripciones: América Latina, África y el Caribe; Europa, Asia y Oceanía; y Estados Unidos y Canadá, donde se elegirá a seis representantes.

En España más de 179.000 ecuatorianos pueden votar en las elecciones generales. El voto en el exterior es facultativo, no obligatorio como lo es para los residentes en el país, y la votación está prevista en 19 localidades españolas con medidas como el uso de mascarilla, distancia de seguridad o lavado de manos con gel hidroalcohólico.

La campaña electoral finalizó en la medianoche del jueves, cuando quedó prohibido por ley cualquier acto de proselitismo político. Además, desde el mediodía del viernes reina la ley seca, un procedimiento habitual que se sigue en procesos electorales en el país suramericano.

Ecuador es la primera nación latinoamericana que acude a las urnas este 2021, en plena pandemia de coronavirus, y ante el desafío de garantizar la modalidad presencial, al ser el voto obligatorio para los residentes en el país entre 18 y los 65 años, y facultativo entre los 16 y los 18, y mayores de 65 años.