La doctora Fernanda Picardi ha hecho estudios de especialización en Brasil, Costa Rica y Estados Unidos. Foto: David Alejandro Chacón.

La especialista explicó que el país posee los equipos, el personal y los centros para atender diversos tipos de cáncer

 

Según datos oficiales del registro del Instituto Oncológico Nacional (ION), en 2017 se registraron 369 casos de cáncer de mama y 111 de cáncer de próstata en Panamá. Un estudio del Ministerio de Salud (MINSA), reveló que entre 2013-2017, en el primer caso la cifra fue 695 pacientes y en el segundo 831.

Ese mismo informe del MINSA, presentado en febrero 2018, alertó que el cáncer es la segunda causa de muerte en el país. Miguel Mayo, ministro de salud, reiteró en aquella oportunidad “que la comunidad debe participar activamente para detectar o prevenir estas enfermedades desde temprano; porque hace la diferencia entre la vida y la muerte”.

Octubre, como ya es tradicional, es el mes de sensibilización sobre el cáncer de mama y de próstata. En Panamá se lanza una campaña nacional y diversas empresas y marcas se unen a esta iniciativa.

Expertos

Fernanda Picardi, oncóloga especialista de la Clínica Hospital San Fernando, explicó que para ambos casos, en el tema prevención no hay muchas diferencias.

“Lastimosamente la prevención no es tan sencilla porque no hay una pastilla o medicina que puedas tomar para evitarla”.

En el caso del cáncer de mama, Picardi sostuvo que si es una persona que no tiene antecedentes familiares o genéticos de ningún carcinoma, es recomendable seguir ciertos hábitos.

“Puede sonar repetitivo, pero lo que se recomienda es que las personas respeten una dieta balanceada, que hagan ejercicios de manera continua, reposar de manera razonable y que duerman de 6-8 horas, aunque para mucha gente ese tiempo es un lujo últimamente”.

Evitar contacto directo con contaminantes conocidos del ambiente es otro punto clave. “Sin embargo, a ninguno se le puede asociar que si entraste en contacto con el pesticida tal vas a tener probabilidades de que te dé cáncer de mama, no obstante todos los tóxicos y productos químicos de tipo industrial, conllevan a un cierto aumento en la probabilidad”.

Importante

Picardi alertó que hacerse mamografías no previene el cáncer de mama, ya que es un examen solo para detectar si existe la posibilidad de padecer la enfermedad tempranamente.

“Es importante, además, no fumar, disminuir la ingesta de alcohol (máximo 2-3 copas de vino) Otro punto clave es prevenir la obesidad porque en el cáncer de mama hay un problema hormonal y la gordura lo que tiende a hacer es distribuir hormonas en la parte periférica del cuerpo”, explicó la especialista.

¿Y las vitaminas ayudan en la prevención? “No, no hay una asociación directa. Hay muy pocas vitaminas que pueden ayudar en la prevención de cánceres, pero no hay ninguna para el cáncer de mama”.

Cáncer de próstata

Picardi explicó que en el tema de prevención, los pacientes que presentan historia familiar con cáncer de próstata, no deben olvidar los chequeos tradicionales como el examen urológico y el PSA.

“Los jóvenes, sobre todo, deben estar muy pendientes porque las probabilidades de tener cáncer de próstata son más altas que en la población que no registra historial familiar de esta enfermedad”.

Por muchos años, el examen de próstata ha sido tema tabú entre los hombres. Picardi cree que eso quedó en el pasado. “A medida que la población ha estado más involucrada en estos controles, esos tabúes se han ido perdiendo. Entendemos que nadie va a feliz a hacerlo, pero ahora con más conocimiento del tema, la visita médica se ha hecho regular”, detalló.

Picardi cerró diciendo que Panamá está a la vanguardia mundial en el tratamiento de diferentes tipos de cánceres. “Es importante hacer la salvedad, ya que para nadie es un secreto, que hay diferencias entre el sector público y privado, pero en general el país cuenta con los equipos y salas especializadas para hacerle frente”.

 

Diferencias

  • El impacto de los tratamientos de los pacientes con cáncer de próstata es mucho menor que en los pacientes con cáncer de mama, en el que los tratamientos son más agresivos.
  • En el caso de una recaída, un paciente con cáncer de próstata puede vivir fácilmente 10-20 años más.
  • En el mismo escenario, pero con cáncer de mama, el periodo es mucho más corto, de dos a tres años.