Ante los anuncios hechos hoy por Monseñor Emir Paul Tscherrig, representante personal del Papa Francisco, en comunicado leído hoy en Caracas ante los medios de comunicación, la Mesa de la Unidad Democrática fija posición en los siguientes términos:

Para los demócratas venezolanos constituye un triunfo la presencia del Vaticano en el conflicto venezolano. Fue la MUD la que propuso inicialmente la incorporación de la Santa Sede para ampliar y fortalecer la mediación. Que la presencia del representante del Papa en Venezuela se produzca precisamente cuando el Régimen secuestra judicialmente el Referendo Revocatorio y cuando los grupos violentos del oficialismo asaltan salvajemente el Palacio Legislativo nos da fuerza y respaldo en esta nueva fase de la lucha.

Para nosotros es claro que esta invitación del Papa al encuentro y el diálogo es un escenario más de nuestra lucha por la restitución del hilo constitucional y de la democracia en Venezuela, y que simultáneamente seguiremos avanzando en los otros tres escenarios fundamentales: La calle, la Asamblea Nacional y la comunidad internacional. En ese sentido, ratificamos el respaldo a la sesión de la Asamblea Nacional que este martes 25 iniciará el proceso de evaluación de la responsabilidad política de Nicolás Maduro en la crisis, y reiteramos la convocatoria a la Toma de Venezuela el próximo miércoles 26.

Ratificamos que para nosotros cualquier proceso de diálogo tiene cuatro objetivos fundamentales: Respeto al derecho al voto, libertad para los presos políticos y retorno de los exiliados, atención a las víctimas de la crisis humanitaria y respeto a la autonomía de los Poderes.

Exigimos que cualquier proceso de encuentro debe realizarse en Caracas, de cara a la opinión pública, manteniendo una comunicación fluida y transparente con todos los sectores del país.