De cara a las próximas elecciones, Aliados por la Niñez y la Adolescencia, grupo de abogacía en favor de los derechos de los niños, niñas, y adolescentes, instó a los 7 candidatos presidenciales a que prioricen en sus planes de gobierno que la niñez –sin distinción– tengan acceso a salud integral, educación de calidad, vivir sin pobreza, crecer sin violencia y a leyes que los protejan.

Este compromiso se formalizó esta mañana en el Auditorio Benjamín Ayechu de la Universidad Católica Santa María La Antigua, donde los candidatos suscribieron un documento con los 5 puntos prioritarios por la niñez y adolescencia.

“En pocos años, estos niños, niñas y adolescentes serán los que rijan los destinos del país; constituirán la fuerza laboral y productiva, darán continuidad al desarrollo del país; y lucharán por la equidad. Garantizarles un país donde gocen plenamente de sus derechos, es y debe ser responsabilidad de todos”, indicó Marisa Arias Thayer, coordinadora pro tempore de Aliados por la Niñez y la Adolescencia

Según la última encuesta de propósitos múltiples, en Panamá viven aproximadamente 1.3 millones de niños, niñas y adolescentes. El Índice de Pobreza Multidimensional de Niños, Niñas y Adolescentes (IPM NNA 2018) indica que 453, 837 niños, niñas y adolescentes se encuentran en situación de pobreza. Por otro lado, más de cincuenta y tres mil (53,000) niños y niñas están fuera de la escuela primaria y más de ochenta y nueve mil (89,000) adolescentes no asisten o no están matriculados en la escuela secundaria.

Aliados por la Niñez y la Adolescencia es un grupo de 34 organizaciones de la sociedad civil, medios de comunicación y el Comité Ecuménico que han establecido una alianza para garantizar la construcción de las bases de un futuro, que surge a través de los niños, niñas y adolescentes. La abogacía que realiza Aliados por la Niñez y la Adolescencia se basa en cinco puntos críticos.

Compromisos

1Salud IntegralGarantizar a todos los niños, niñas y adolescentes el derecho a la salud entendido como el estado de completo bienestar físico, mental, espiritual, emocional y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades, dirigido a promover su desarrollo actual y futuro, desde la gestación.
2Educación de calidad Garantizar que todos los niños, niñas y adolescentes tengan acceso a una educación de calidad, aumentando asistencia, permanencia y cobertura, mejorando la gestión educativa y consolidando un sistema efectivo de monitoreo y evaluación.
3Menos PobrezaLa pobreza priva a los niños, niñas y adolescentes de sus derechos. El estado panameño se ha comprometido a erradicar la pobreza extrema para todas las personas. Por tanto, al 2024, la meta es reducir la pobreza extrema al 6% y la pobreza multidimensional en los niños, niñas y adolescentes a no más del 20%, haciendo mayor énfasis en los territorios donde hay mayor concentración de pobreza, monitoreando el IPM-Infantil al menos cada dos años.
4Crecer sin violencia  Todos los tipos de violencia son prevenibles y ningún tipo de violencia es justificable.  Por esto, se debe implementar la Estrategia Nacional para la Prevención de las Violencias en Niños, Niñas y Adolescentes, que es multidimensional y sectorial. Adicionalmente, se debe dotar a las instituciones de los recursos para invertir en los servicios y atenciones.
5Leyes que garanticen sus derechosAprobar e implementar la Ley que crea el Sistema de Garantías y Protección Integral de Derechos de la niñez y adolescencia (presentada ante la Asamblea Nacional en el mes de abril de 2018), y comprometerse a impulsar la revisión y reforma de normas en materia de niñez para armonizarlas con lo establecido en la Convención sobre los Derechos del Niño y otros estándares internacionales de derechos humanos.

 

 

Con su firma, los 7 candidatos se comprometieron a incorporar estos cinco temas en sus planes de gobierno, de llegar a ganar las elecciones presidenciales de mayo próximo. Por su parte, Aliados por la Niñez y Adolescencia se compromete a acompañar al futuro gobierno en la consecución de estos objetivos; sin dejar de lado su rol de monitoreo y abogacía en temas de niñez y adolescencia.