El pasado 19 de noviembre, HBO Max emitió el esperado reencuentro de Will Smith y los actores de El Príncipe de Bel Air, organizado por el 30 aniversario de la popular serie de TV de los años 90.

Y como era de esperarse, el programa estuvo cargado de muchos momentos emotivos. Pero sin duda alguna, el que más emociones desencadenó fue el del ‘alto al fuego’ que escenificaron Will Smith y Janet Hubert, tras 27 años de enemistad pública a través de los medios.

Para entender la trascendencia de esta inesperada reconciliación, hay que remontarse al final de la tercera temporada, cuando la actriz que interpretó a la tía Vivian abandonó la serie y fue reemplazada en su rol por Daphne Reid. Entonces, Hubert acusó a Smith de presionar a los responsables de NBC, la cadena que emitía la serie, para que la forzaran a marcharse. Y a lo largo de los años, los ataques de la artista a Smith han sido continuos, convirtiéndose, a ojos del público, en la enemiga número 1 de la estrella de Hollywood.

Pero el reencuentro de HBO Max sirvió para aclarar las cosas y para que los dos actores cerraran finalmente sus heridas y decidieran enterrar el hacha de guerra.

Hubert declaró que la razón verdadera por la que decidió no continuar en la sitcom fue que el contrato que la ofrecieron era muy pobre, y por entonces, ella estaba atravesando un momento personal difícil, con su marido desempleado. Y Smith, por su parte, reconoció que pudo haber puesto «las cosas más difíciles para Janet», que acabó perdiendo su reputación en la industria.